La compañía de ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas para edificios Kone ha logrado alcanzar la neutralidad de carbono en sus centros de producción en todo del mundo. La multinacional de origen finlandés destaca que ha alcanzado este hito con 18 meses de antelación a lo previsto.
"Nos sentimos muy orgullosos de haber conseguido un hito tan importante y pionero. El camino hacia la neutralidad de carbono es largo y gradual. Sin embargo, logros como este son el punto de partida que nos llevará a continuar mejorando las operaciones propias de Kone, así como en nuestros productos y en la cadena de suministro", afirma Giovanni Lorino, director general de la firma para la península ibérica e Italia.
Kone cuenta actualmente con diez unidades de fabricación, repartidas en siete países alrededor del mundo. Todas ellas han puesto en marcha actividades para reducir las emisiones de alcance 1 (las directas, producidas como resultado de su actividad) y alcance 2 (las indirectas, generadas por la electricidad consumida y comprada) en un 71% respecto al año 2018.
Como parte de los objetivos de emisiones de alcance 1, la compañía apuesta por la eficiencia energética y por la transición hacia la utilización de vehículos eléctricos en todas sus unidades de fabricación. Asimismo, la firma ha realizado inversiones en eficiencia energética, robótica, automatización de las líneas de fabricación y, en particular, en sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado, aumentando el ahorro de energía. En 8 de cada 10 fábricas, las carretillas elevadoras han sido reemplazadas por carretillas eléctricas, y la mayoría de las carretillas restantes de diésel funcionan ahora con biocombustibles.
Además, Kone ya ha instalado paneles solares en nueve de las diez instalaciones, y todas ellas utilizan electricidad 100% renovable desde principios de este año. En dos de las fábricas se utiliza calefacción urbana ecológica, y el resto de las emisiones de carbono se compensan a través de una empresa externa.
La multinacional finlandesa anunció en 2020 sus objetivos climáticos, que fueron validados previamente con la iniciativa Science Based Targets (SBTi), para reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de cara a 2030. El compromiso de la empresa es reducir las emisiones de sus propias operaciones hasta en un 50% respecto a 2018, tanto las directas como las indirectas. Además, Kone pretende conseguir una reducción del 40% en las emisiones relacionadas con los materiales de sus equipos y en el consumo de energía durante la vida útil de los mismos en el plazo fijado.