“La construcción es una de las actividades menos digitalizadas de la economía, pero se está transformando debido a su importancia como sector estratégico”. Esta es una de las conclusiones del último informe del Observatorio Industrial de la Construcción, de la Fundación Laboral de la Construcción, titulado: ‘El sector de la construcción y las tecnologías de la información y comunicación’. Según el Índice Sintético de Digitalización del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), una de las fuentes utilizadas por el estudio, la construcción se sitúa en la última posición, con respecto a la media del total de sectores. Sin embargo, hay que tener en cuenta que existen importantes diferencias por tamaño de empresa dentro del sector: las más grandes cuentan con un nivel tecnológico más desarrollado, mientras que las pymes, que representan el gran grueso del sector, están a la cola.
Durante el informe se insiste en que “la transformación del sector de la construcción requiere que las personas trabajadoras adquieran un nuevo conjunto de competencias para poder hacer frente a los nuevos desafíos, despuntando como factores clave los avances tecnológicos, la fabricación fuera de obra (off site), los retos sobre el cambio climático y la necesidad de una mayor eficiencia energética, etc.”. Las dificultades que se encuentran las empresas a la hora de implantar y mejorar el nivel de digitalización que poseen se concentra en la falta de presupuesto (49,1%) y en la falta de personal con un nivel de digitalización adecuado: falta de personal con las competencias necesarias (42,2%) y falta de perfiles adecuados (41,8%). Aunque hoy por hoy “solo 1 de cada 10 empresas de la construcción proporciona formación en TIC a sus empleados y empleadas”, la clave está en el aumento generalizado de las demandas en competencias digitales. Únicamente el 6% de las empresas emplean especialistas en estas materias. Concretamente, el 4% son expertos en datos, el 2,3% en ciberseguridad y el 0,3% en inteligencia artificial (IA). Atendiendo al proyecto europeo Construction Blueprint, liderado por la Fundación Laboral de la Construcción (FLC), las competencias digitales que necesitan las empresas son, de forma mayoritaria, el uso de software de CAD para la producción y actualización de dibujos en 2D y 3D y la realización de presupuestos con programas informáticos específicos, incluido BIM (Building Information Modeling). Precisamente, desde la entidad paritaria se ha puesto a disposición de las empresas y de las personas trabajadoras un completo itinerario formativo BIM, así como acciones formativas sobre innovación (denominadas en el ámbito educativo MOOC, Massive Online Open Courses, o cursos masivos online abiertos y de corta duración).
El informe desvela que, de todas las tecnologías de adquisición de datos, los sensores son la tecnología con el nivel más alto de madurez y preparación tecnológica. Mientras que los procesos de automatización en el sector de la construcción se refieren al uso de robots, impresoras 3D y drones para automatizar tareas concretas del sector. Además, el 88% de las empresas utiliza la firma digital, la factura electrónica cuenta con un grado menor de implantación y solo el 42,8% de las compañías enviaron estas facturas permitiendo su procesamiento electrónico. También es mayoritario el uso de las redes sociales. Las empresas que utilizan medios sociales en el sector ascienden al 56,3%, aunque en el conjunto de la economía, los utilizan el 67,3% de las empresas.
Por otro lado, solo 2 de cada 10 empresas de la construcción utiliza la nube en su trabajo diario, y lo hacen principalmente para almacenar ficheros. Mientras que el análisis con Big Data sólo es utilizado por 1 de cada 10, y su uso más común es a través de fuentes de datos por geolocalización a partir de dispositivos portátiles (67,8%), el 35% de datos de medios sociales y el 21,4% de datos de la propia empresa generados por sensores o dispositivos inteligentes. Asimismo, el 22,5% de las empresas del sector ha utilizado dispositivos monitorizados a través del internet de las cosas (IoT): el 82,4% en relación a la seguridad en las instalaciones y el 28% para la gestión del consumo de energía. Respecto a la inteligencia artificial, el 6,8% de las organizaciones utiliza este tipo de tecnología en el sector. Los principales usos tienen que ver con la organización de procesos, la administración o el marketing y las ventas.
Este documento deja buena muestra de los numerosos beneficios que puede aportar la digitalización para las empresas, por ejemplo, agilizar procesos, aumentar la producción, reducir costes, etc. Para impulsar el acceso a estas tecnologías digitales existen algunos programas de utilidad como son la Plataforma ‘Acelera pyme’, que cuenta con herramientas que permiten a las empresas conocer su nivel de madurez digital, complementado por servicios y contenidos disponibles acordes con dicho nivel. Enmarcado en esta plataforma hay que destacar el Kit Digital, cuyo objetivo es subvencionar la implantación de soluciones digitales para conseguir un avance significativo en el nivel de madurez digital de las pymes. Este servicio ya ha recibido más de 174.000 solicitudes habiéndose concedido más de 25.500 bonos de digitalización.
Por otro lado, y a nivel europeo, la Comisión Europea ha puesto en marcha un portal web específicamente dedicado a impulsar la digitalización de las pequeñas y medianas empresas del sector de la construcción, donde se incluye información y herramientas que pueden servir de apoyo a las pymes del sector de la construcción para avanzar en su digitalización: https://digital-construction.ec.europa.eu/.