Knauf, firma alemana dedicada a la fabricación de placas de yeso laminado y productos para la construcción en seco con filial en España, construirá su primera planta de biomasa en su fábrica de Guixers (Lleida). La instalación, que se espera que esté totalmente operativa en diciembre de 2024, reducirá alrededor del 35% de sus emisiones.
En las mismas instalaciones, la compañía viene realizando diferentes actuaciones que han logrado que sus emisiones de CO2 hayan disminuido considerablemente y se encuentren en la actualidad, aseguran, entre las más bajas del mundo en su sector. Después de poner en marcha la planta fotovoltaica, gracias a la cual Knauf producirá más de 500.000 kWh anuales, ahora la compañía da un "gran paso" en su hoja de ruta hacia la descarbonización con la nueva planta de biomasa.
La instalación, que también tendrá impacto en la comunidad local al generar cerca de 200 puestos de trabajo y reducir el riesgo de incendios forestales en la zona, se integrará directamente en las operaciones de la fábrica de Knauf Guixers llevando la acción a cabo desde el principio del proceso, es decir, comenzando incluso con la compra de biomasa forestal pura en el mercado de proximidad – a menos de 150 km de distancia- y con el requisito de procedencia sostenible requerido por la reglamentación en vigor. Además, la planta de biomasa será de 7,5 MW, con lo que se podrá reemplazar energía de origen fósil por renovable.
"En Knauf, estamos comprometidos a liderar el cambio hacia operaciones más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Con la construcción de esta planta de biomasa en nuestra fábrica de Guixers, no solo reafirmamos nuestro compromiso con la sostenibilidad medioambiental, sino que también reforzamos el apoyo a la comunidad local de la zona" ha asegurado Alberto de Luca, CEO de Knauf Ibérica, quien añade que la puesta en marcha del proyecto es un paso significativo hacia la reducción de nuestra huella de carbono y la consecución de las cero emisiones para 2045.
Este hito es una de las piezas clave de la firma en su plan de descarbonización. Los siguientes pasos del mismo van dirigidos a reducir su propia huella en el planeta con diferentes acciones y objetivos a alcanzar a medio y a largo plazo. Entre ellos se encuentran reducir los recursos hídricos al 2% anual, llegando a un equilibrio entre consumo de agua y una producción de calidad, así como disminuir sus emisiones al 50% antes de 2032.