Aunque el comportamiento de este segmento suele ser muy similar, cuando no idéntico, al del termoformado, la actividad de este campo parece mantenerse en la tónica alcista de campañas anteriores. Las posibilidades que presenta esta tecnología en un campo tan delicado como los cárnicos (donde las claves residen en conseguir que el producto tenga una vida más larga en el lineal y que su presencia sea lo más atractiva posible) son las que más están haciendo porque este mercado permanezca con mucho movimiento.

La revolución tecnológica que se produjo hace unos años no ha cesado todavía y las mejoras en los procesos en los aspectos antes reseñados se siguen produciendo, al tiempo que aumentan las velocidades de procesos y los equipos para facilitar los cambios de formato. La orientación clara es hacia la exportación, pero no de la máquina, sino del producto envasado. La relativa buena marcha de la venta de carne en el exterior (en 2010 la carne de ternera exportada aumentó de 89.362 t a 97.939 t y en 2011 el porcino pasó de 869.000 t a 995.000 t, según datos del ICEX), unida a la necesidad de muchas empresas de reconducir sus producciones (por la caída de canales como el Horeca) hacia la alimentación envasada para darles salida, han permitido que la demanda de equipos de termosellado mantenga el tono.

Dairypack se centra en su “Core Business”

Aunque el sector ha bajado un poco la intensidad en cuanto a operaciones empresariales, éstas no han sido escasas en el último año. Una de las firmas que más ha crecido últimamente, Integral Packaging Solutions (Dairypack), amplió capital en 350.000 €, una operación que permitió a Ulma colocarse como accionista casi único de la compañía. Ulma había entrado en su accionariado a principios de 2009 al adquirir el 80% de los títulos al empresario José Félix Sanz Vicente. Paralelo a este cambio, la empresa volvió a centrarse en su actividad principal, la fabricación de equipos de termoformado y termosellado para industria láctea, postres y confituras ya que también durante 2011 dejó de fabricar maquinaria de final de línea, un negocio que desarrollaba desde principios de 2010 cuando se hizo con una nave en régimen de alquiler en Rubí (Barcelona) de 1.500 m2, donde fabricaba enfajadoras, transportadoras, paletizadoras, encajadoras, formadoras de bandejas, máquinas multipack y cerradoras. La italiana Ilpra Systems, muy volcada en los últimos años en el desarrollo de maquinaria de procesos de última generación, invertirá en este ejercicio un total de 1,3 M€ para I+D (300.000 €), mejoras en su planta y adquisición de maquinaria.

Nueva etapa en Grupalia

Otro movimiento producido el pasado año fue la reestructuración de la actividad de la gerundense Grupalia Tecnología Alimentaria, que finalizó con la creación de una nueva sociedad, Grupalia Pack Soluciones, encargada de continuar la actividad del grupo en el área del Packaging. Hasta ese momento existían dos sociedades, Grupalia Tecnología Alimentaria y Grupalia Pack, que se repartían un catálogo que comprendía varias firmas de ámbito nacional e internacional relacionadas con la maquinaria de procesos y el envasado. La división de maquinaria para procesos, muy vinculada a la industria alimentaria, fue traspasada a Industries Fac, de Santa Coloma de Farners (Girona), con la que mantenía una larga relación (los productos de Industrias Fac eran representados por Grupalia).

El catálogo de la nueva Grupalia Pack Soluciones se centra en el sector del packaging, fundamentalmente final de línea, identificación automática, etiquetado y automatizaciones, pero también termosellado, a través de la marca ‘Mondini’. Para éste su primer ejercicio, la compañía estima que alcanzará un volumen de negocio de 8 M€, de los cuales en torno al 15% procederán de exportaciones al mercado portugués. En sus últimas campañas, el grupo Grupalia movía un volumen de negocio de unos 12 M€ anuales entre sus dos ramas de actividad, de las cuales unos 3 M procedían de exportaciones.

En el capítulo de novedades, cabe destacar el caso de Ishida, uno de los grandes grupos a nivel internacional representado en España por Comercio e Importación de Máquinas Automáticas (Cima), que a finales de 2011 presentó ‘Flex-Line’, un equipo de envasado de bandejas de doble carril para alimentos frescos que permite a los fabricantes de alimentos crear líneas de envasado a la medida de sus necesidades específicas trabajando con dos productos diferentes (ya sea tipología, tamaño o peso) de manera simultánea e independiente, permitiendo efectuar cambios en uno de los carriles mientras el otro sigue en funcionamiento. Por último, mencionar también el caso de 'Mecapack', la nueva marca comercial de Mecaplastic Ibérica que cuenta con dos nueva gamas de termoselladoras en catálogo: 'Flex 3.500', que permite cambios de formato en menos de dos minutos, y 'O2', un equipo de termosellado en línea.