Aunque ha experimentado un notable crecimiento en los últimos ejercicios (a medida que iba saliendo más allá de su sector de crecimiento, el galletero) el campo del flow-pack sigue teniendo una dimensión más reducida que sectores hermanos dentro de la maquinaria de envasado horizontal. Esto ha supuesto una importante ventaja dada la crisis actual, ya que el número de actores que protagonizan este campo es relativamente reducido.
Pero, más allá de la crisis, la sensación que existe es que las posibilidades siguen siendo muy elevadas, lo que ha redoblado la apuesta por el flow-pack. Además del ejemplo de Teixpac, tratado en los capítulos anteriores, también Lapeyra & Taltavull ha presentado novedades para reforzar su posición, como han sido un equipo de sellado por ultrasonidos, una línea con dispositivos ‘Reaseal-It’’, para el recerrado del envase, y ‘SwiftRip’, que incluye una muesca para facilitar la apertura, y, por último, una línea integrada en un módulo de robot pick & place de la firma Gerhard Schubert.
Mirando al termoformado
Pese a su potencial, las protagonistas de este segmento también tienen interés en crecer en otros campos. Durante este ejercicio, la murciana Carugil, especializada en el montaje de líneas integradas para la producción de chicles en grageas, envueltos y caramelos de palo, ha ampliado su gama de maquinaria para E+E (centrada en equipos flow-pack y horizontales) con la suma de un equipo vertical multipista y ampliando su cartera de soluciones de final de línea. Esto le ha permitido que la maquinaria para packaging sea le aporte ya el 50% de sus ingresos.
Pero el protagonista absoluto ha sido el líder del mercado de envasado, Ulma Packaging, y principal empresa de esta área de negocio, que entre 2008 y 2009 ha centrado todos sus esfuerzos en convertirse en un proveedor integral de E+E. A mediados del pasado año ya dio un primer paso con la integración de la división de final de línea de Coop. Rochman (sociedad que formaba parte de la estructura del grupo Ulma) dentro de su área de trabajo.
Más fábricas para el líder
Pero fue a principios de 2009 cuando dio el paso para acrecentar su liderazgo en la maquinaria de envasado al hacerse con Integral Packaging Solutions (IPS Dairypack), una compra orientada a hacerse con un importante hueco en el negocio del termoformado form-fill & seal , donde no tenía presencia. Con esta operación se hizo con dos factorías situadas en Lardero (La Rioja), de 2.800 m2 y 800 m2, respectivamente (la más pequeña, para labores de mecanizado) y, además, se quedó con los negocios de producción de termoformado al vacío y con gas, termosellado, flow-pack y vertical de la riojana Bilopack (que sigue en activo con otras actividades y es independiente a Ulma), con la que IPS Dairypack formaba grupo.