Alimarket Envase ofrece a través de dos artículos, el primero de los cuales se muestra hoy, 10 de las claves que hay que seguir en 2018 para entender la evolución probable de la industria del packaging en España a partir de alguno de las tendencias que ya se han podido detectar en el año recién terminado.

* El cartón y el vidrio se internacionalizan : aunque la economía española lleva tiempo buscando salidas en el exterior, nadie lo ha hecho tan bien en los últimos años como las industrias que operan con estos materiales. Como máximo exponente de sectores que priman la acción local (a partir de determinadas distancias resulta inviable económicamente el suministro de cartón ondulado o de vidrio por el encarecimiento de costes logísticos) y con un mercado español claramente definido geográficamente, la salida natural de las compañías líderes para seguir creciendo pasa por expandirse fuera de nuestras fronteras , especialmente en Europa.

Dos grupos han liderado este tipo de movimientos en el último año: Saica y Vidrala. El primero, que ha protagonizado en los últimos años un proceso de expansión internacional que le ha llevado a probar en nuevos caladeros, como el embalaje flexible, se prepara ahora para reforzar su presencia en Francia con la adquisición de Emin Leyder, operación en fase de análisis por parte de la Comisión Europea que podría quedar aprobada este próximo mes de febrero.

En cuanto a Vidrala, la compra de Santos Barbosa, completada este verano, le ha permitido consolidarse como cuarto productor europeo de vidrio. Pese al protagonismo de estos sectores, otros campos, como el del flexible, con el grupo Emsur a la cabeza; las etiquetas, con Printeos; o la taponería, con Ramondin, también han mostrado su vocación por una internacionalización que continuará en 2018.

* Los grandes diversifican a lo grande: alcanzado una posición de dominio en muchos casos apabullante en sus propios segmentos de actividad, algunos de los principales conglomerados mundiales del packaging han abierto un proceso siempre complejo como es la entrada en áreas dentro del packaging que le son completamente ajenas. A la vista de que insistir en su core business muchas veces es contraproducente (las desinversiones exigidas para mantener los niveles de Competencia reducen las sinergias que se generan en las macrofusiones, como se puede observar en casos como el de la fusión Dow-DuPont), muchas empresas han optado por abrirse a otros campos en los que intuyen grandes oportunidades de negocio a base de exportar un modelo propio que les ha llevado al éxito y al aprovechamiento de oportunidades conjuntas.

Al mencionado caso de Saica con el mercado del flexible, en el que de nuevo volvió a profundizar este año, cabe destacar la adquisición de la especialista en embalaje industrial Signodé por parte del grupo Crown Holdings. Una de las principales operaciones de 2017, la compra de Linpac Packaging por parte de la alemana Klockner, ha permitido al grupo resultante, denominado KP, diversificar su actividad más allá de la lámina y el film plástico, entrando también en el mundo de la bandeja. A principios de año, una de las corporaciones más importantes del sector de la electrónica de consumo, Panasonic, se hacía con un especialista en identificación automática como Zetes. En el mundo del metal, Silgan se hacía por esas fechas con la división 'Calmar' de Westrock, poniendo así un pie en el envase cosmético. A nivel local, Ondupack acometía inversiones para entrar en el mercado del PET. Por último, cabe destacar la rumorología en torno al futuro del principal fabricante de embalaje flexible en Norteamérica, Bemis Packaging, que parece contar con muchas novias, entre ellas el grupo cartonero británico DS Smith.

* Los nuevos actores se quedan con las pymes: la fuerza de la recuperación económica, la mano de obra cualificada abundante (aunque no en todos los segmentos) y unos costes laborales contenidos han permitido a la industria española del packaging ser de nuevo atractiva a los ojos de los inversores de todo el mundo. Si hace unos años la forma de hacerse un hueco en nuestro mercado era vía adquisición de un grupo ya establecido, las multinacionales que todavía no están presentes en España han elegido ahora otra vía: la compra de pequeñas y medianas empresas bien posicionadas en sus sectores de referencia.

Generalmente, estas operaciones se completan con programas de inversiones que vieron la luz en 2017 pero se desarrollarán sobre todo en el año que acaba de comenzar. Caben destacar casos como el del grupo Aurelius, que desembarcó en el mercado español con la adquisición de Abelan; la italian Sirap-Gema, que compró a finales de año dos unidades productivas de la estadounidense Reynolds, una de ellas en España; Softbox, que se hizo este verano con el especialista en embalaje de temperatura controlada Tempack; Kingspan que apostó por el mercado español del EPS y los aislantes para construcción con la compra de Synthesia; la entrada de la francesa Lafite en Manufacturas Metálicas Canals, acaecida también a principios de año; la apuesta de la británica Bunzl por el packaging español con la operación sobre Tecnopacking; o el desembarco de la alemana Jockey en Trebolin Plásticos , en la que compró el 100%.

* Fatiga de la I+D+i clásica: el mercado español del packaging ha intentado en todo momento, incluso en los peores años, mejorar su posición vía innovación. La necesidad de generar valor añadido ha sido una constante, y a esta marca de la casa se ha unido en la última década una apuesta más decisiva que nunca por la mejora de la sostenibilidad de sus productos. Sin embargo, en el último año se observa un cambio en la tendencia de la inversión en I+D+i que parece que seguirá en las próximas campañas. De un modelo en el que la empresa invertía para el desarrollo de nuevos productos o mejora de los existentes, se está pasando a un nuevo sistema en el que la I+D+i se realiza de la mano del cliente y para ese cliente específico.

Los institutos tecnológicos han pasado a liderar la inversión clásica en I+D, acompañados por universidades y empresas privadas, pero el sector está encaminándose a una fórmula mucho más abierta basada en una colaboración a la medida del cliente que después se pueda extrapolar. Aunque con distintos nombres y filosofías de fondo, en 2017 se han puesto en marcha cuatro laboratorios/centros de experiencia en nuestro país, los pertenecientes a los grupos Jabil Packaging, Klockner Pentaplast, Smurfit Kappa y DS Smith. El modelo, que busca un análisis desde la fase de elaboración del contenido y su packaging hasta la puesta en la estantería del supermercado, es por ahora patrimonio de las grandes compañías, que con esta fórmula buscan además compartir conocimiento y trasladar casos de éxito a nuevos mercados.

* El e-commerce sigue esperando respuestas: un año más, el comercio online aumenta su protagonismo, como lo prueba, por ejemplo, la consolidación del fenómeno del Black Friday. Aunque el crecimiento en este año no ha sido tan alto como algunos pronosticaban, la realidad es que esta modalidad de venta tiene ya unas dimensiones considerables. Su relación con el packaging dista de ser fácil ya que después de una primera fase en la que la prioridad de las empresas era garantizar que el producto llegara en perfectas condiciones para generar confianza en el consumidor, la clave ahora es reducir el volumen de embalaje que le rodea y encontrar nuevas funcionalidades para el mismo, sobre todo en relación con la experiencia de consumo, la imagen de marca e incluso las promociones limitadas.

Por el momento, el gran ganador en la batalla por conquistar el comercio online es el cartón ondulado, gracias sobre todo a su resistencia y modulabilidad, si bien el plástico aspira a conquistar nichos que le permitan ganar cuota.