La multinacional papelera Lecta, propiedad del fondo de capital riesgo CVC, ha invertido 44,2 M€ en 2018, que se suman a los 45,2 M desembolsados un año antes, en sus plantas españolas, gestionadas a través de Torraspapel. Principalmente, la fábrica de Almazán (Soria) recibió unos 13,1 M y la de Leitza otros 9,3 M. Además, las centrales de cogeneración de Torraspapel absorbieron otros 10,3 M€, según ha publicado Expansión.
El ejercicio 2018 de Lecta se cerró con una cifra de ngocio de 1.486 M€ (+1,9% respecto a la campaña anterior), incluyendo la española Torraspapel, la italiana Cartiere del Garda y la francesa Condat. De esta facturación total, 1.390 M correspondieron a la comercialización de papel (+1,9%) y 96 M a la venta de energía (+2,1%).
El ebitda de Lecta se situó en 116,3 M€, un 2,5% por debajo del ejercicio anterior, con pérdidas de 2,4 M€. Un descenso que la compañía atribuiría al retroceso de las ventas de papel en volumen y a los mayores costes energéticos.
En cuanto al primer trimestre del ejercicio en curso, Lecta incrementó ventas un 3,6% (hasta los 389 M€) respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que el ebitda mejoró un 5,8%, hasta los 26,8 M€. En cambio, las pérdidas aumentaron un 54,1% y se situaron en torno a los 5,8 M€.