El Grupo Vidrala ha anunciado su intención de adelantar el cierre de uno de los hornos que tiene operativos en su sede de Llodio (Álava). En concreto, la compañía tiene previsto clausurar el ‘Horno 1’, el más pequeño de los que operan en esta instalación, lo que debería de producirse, si las negociaciones con los sindicatos evolucionan favorablemente, en el primer trimestre del próximo año. La compañía ya tenía en sus planes su cierre en 2024, tal y como comunicó a los trabajadores hace dos años, por tratarse de una instalación “poco competitiva”, pero ha decidido adelantar el mismo unos meses debido a la coyuntura actual del mercado, dominada por “la debilidad de la demanda y la persistente inflación de costes, especialmente energéticos y salariales". La dirección de Vidrala asegura que el cierre del horno vendrá acompañado de "un plan no traumático" y que se pondrán en marcha salidas incentivadas para los trabajadores afectados, en torno a 80 de los 320 trabajadores que operan en este centro (en total el grupo cuenta con una plantilla de 3.673 empleados).
El horno en cuestión está especializado en la fabricación de vidrio blanco para una amplia gama de productos como tarros de conservas, licores, refrescos, etc. Su cierre comporta también la clausura de las dos líneas de producción asociadas al mismo (los otros dos hornos suman otras seis líneas en total), lo que significará bajar los ritmos productivos por debajo del nivel actual, que asciende a unos 2 M de envases/día para el conjunto de este centro. En este sentido, Vidrala se ha comprometido a ejecutar en los próximos años unas inversiones de 50 M€ para mantener la competitividad de esta planta y retomar, e incluso superar, los niveles productivos actuales.
Analizando proyectos para este centro
A este respecto, se ha puesto especial énfasis con dos posibles proyectos. El primero tiene que ver con mejoras en la instalación de composición de materias primas, el espacio donde se preparan las mezclas (calcín, sosa, arena) para después introducir en el horno. De acuerdo a sus planes, el espacio que actualmente ocupa el ‘Horno 1’ podría aprovecharse para hacer un nuevo lay out y modernizar esta fase en concreto. El segundo tiene que ver con el montaje de una instalación fotovoltaica en este centro, uno de las estrategias que más activamente esta siguiendo la compañía. Actualmente Vidrala dispone de de dos instalaciones de este tipo en sus factorías de Caudete (Albacete) y Castellar del Vallès (Barcelona), esta última abierta hace pocos meses. Actualmente está montando también un centro de producción fotovoltaico en uno de sus dos centros de Marinha Grande (Portugal) y espera iniciar una inversión similar a principios de 2024 en su planta de Corsico (Italia).
Además de la red productiva señalada hasta ahora, la compañía cuenta también con instalacionesen Derrylin (en el condado norirlandés de Fermanagh) y Elton (en el condado inglés de Chesire). En conjunto, Vidrala dispone de 8 plantas y, hasta ahora, 19 hornos, y comercializa 8.300 M de envases anuales con más de 1.600 clientes. Asimismo, desde febrero de este año, controla el 29,36% de la brasileña Vidroporto, sobre la que posee un acuerdo para la compra del 70,64% restante. En 2022 alcanzó unas ventas consolidadas de 1.346,58 M€ en 2022, lo que representa un crecimiento del 24,1% frente a los 1.084,70 M€ de 2021, y del 23,9% a divisa constante. De este importe, 465 M fueron realizados en el mercado nacional, un 29% por encima de los 360,6 M del curso precedente; mientras que las ventas realizadas en los mercados exteriores alcanzaron los 881,5 M, un 21,7% más sobre los 724,1 M de 2021.
