La planta de producción de O-I en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra, explotada a través de la filial Vidriería Rovira, ha obtenido las certificaciones ISO 22000 y FSSC 22000, que reconocen la excelencia en la gestión de los estándares de calidad en los procesos de producción de alimentos y en la mejora de las capacidades y rendimiento de la compañía. Para obtener estas acreditaciones, la planta andaluza ha superado de forma exitosa una exhaustiva auditoría de supervisión de la calidad de todos sus procesos de gestión productiva llevada a cabo por la Organización Internacional de Normalización (ISO). Los puntos clave valorados para otorgar la certificación han sido la gestión de la organización en relación a los clientes, liderazgo, compromiso del personal, enfoque a procesos y sistemas, mejora continua, enfoque de la dirección y proveedores.
Equipada con equipos de fabricación de última tecnología, la planta dispone de un horno y cuatro líneas de producción especializadas en la fabricación de envases de vidrio para alimentación, licores y bebidas no alcohólicas. En 2012, este centro sufrió una profunda reestructuración, con unas inversiones en medios técnicos y humanos superiores a los 11 M€. En ese mismo año, se desempeñaron en ella 5.000 horas de formación en materias como Prevención de Riesgos Laborales, Calidad, Seguridad Alimentaria y Cultura del Bienestar. Entre los éxitos recientes de la planta, la compañía destaca el récord de más de 465 días sin accidentes con baja laboral.
Las certificaciones de calidad ISO 22000 y FSSC 22000 son un o estratégico que le permitirá a esta planta mantenerse en una posición competitiva dentro del mercado, con el fin de ofrecer productos de calidad, servicios integrados y máxima flexibilidad para sus clientes y los requerimientos cada día más exigentes del consumidor final. En este sentido, el Director de Ventas de O-I en España y Portugal, Gonzalo Fernández, ha señalado que "esta certificación representa el reconocimiento oficial a la excelencia en los estándares de calidad de nuestra compañía y nos será de gran utilidad en el trabajo diario con nuestros colaboradores, ya que certifica el nivel de nuestras instalaciones y la calidad de nuestros procesos de producción. Además, también es una muestra inequívoca de nuestro compromiso y voluntad de futuro con nuestros clientes, así como con el medio ambiente, lo cual nos permite afianzar nuestra posición de líderes en la fabricación y comercialización de envases de vidrio".
O-I, que en los últimos años ha cambiado su modelo de facturación en España, cerró 2011 con unas ventas de 106,84 M€, casi idénticas a las logradas en el año anterior. Además de la planta sevillana dispone de otra en la Zona Franca de Barcelona, igualmente explotada por Vidriería Rovira y especializada en vinos y cavas, principalmente.