La fabricante gerundense de tapones de corcho para cavas y champagne Francisco Oller ha anunciado la compra de la también gerundense Uprodeco, dedicada a la producción y tratamiento de granulado de corcho, además de paneles aislantes y barras y mangos aglomerados. La operación ha supuesto para Oller un desembolso inicial de 1,8 M€ y le permitirá completar su cadena de valor, estando presente en todas las fases de fabricación del tapón de corcho.
Hasta la fecha, Uprodeco formaba parte del grupo Corcho del País, que completó su adquisición en 2009. Como se recordará, hace unos meses, Corcho del País entró en liquidación, después de no haber podido superar el concurso de acreedores en el que se encontraba inmerso desde febrero de 2015, al haber acumulado una deuda de más de 15 M€.
Ya entonces, los responsables de Corcho del País hicieron públicas las gestiones que estaban realizando para la venta de Uprodeco, la única de las sociedades que todavía se mantenía operativa, con siete trabajadores, que pasarán a formar parte de la plantilla de Francisco Oller.
Uprodeco opera instalaciones en Cassà de la Selva, con una superficie de 28.000 m² y un molino con capacidad para triturar 9.000 t de corcho anual. La intención de Francisco Oller pasa no solo por mantener el negocio, sino por evolucionarlo, con la producción de referencias de mayor calidad y la regeneración de los alcornocales catalanes de los que procede la materia prima, con un importante proyecto de mejora de al gestión de estos bosques y su explotación.
Integrada en el grupo luso Amorim, Francisco Oller es actualmente la tercera operadora del sector corchero en España, con unos ingresos en el último ejercicio de 22,5 M€, un 6,7% más que en el ejercicio anterior, con presencia tanto en el mercado nacional como en otros países como EEUU, Argentina, Australia, Alemania, Francia, Suiza, Italia, India, Turquía, China o Indonesia. Esta partida correspondiente a la exportación ascendió en 2015 a 16,2 M€, un 4,5% más que en 2014. Sus instalaciones centrales se ubican en Cassá de la Selva (Girona), con capacidad para la producción de 280 M de tapones anuales, principalmente, para cavas y champagne, si bien, cuenta con centros también en Reims (Francia) -especializada en gamas altas-, Fussgonheim (Alemania) -para la finalización del producto y gestión comercial del mercado alemán- y San Vicente de Alcántara (Badajoz), esta última, gestionada por su filial Surodis y especializada tratamiento de materia prima y la elaboración de discos.