El fabricante de envases plásticos ITC Packaging ha desarrollado una nueva tecnología denominada ‘TWI-PET’ (Thin Wall Injection for PET Packaging), que convierte a la compañía ibense en pionera en la fabricación de envases de pared fina mediante la inyección en un solo paso de PET.
El nuevo sistema de fabricación desarrollado por ITC, frente a otros existentes, permite reducir un 15% el espesor de la pared comparado con otros envases de inyección, optimizando el peso y la cantidad de materia prima necesaria para su fabricación manteniendo una alta transparencia. En las primeras pruebas industriales se ha conseguido rebajar el ciclo de inyección hasta un 10%, logrando una alta eficiencia de fabricación y ofreciendo un alto rendimiento industrial gracias a su comportamiento en línea.
Los envases ‘TWI-PET’ permiten incorporar la decoración IML que permite realzar el producto en el lineal con etiquetas que pueden ser de PP o PET siendo, en ambos casos, reciclables. Esta nueva tecnología ofrece la posibilidad de incorporar hasta un 30% de rPET apto para uso alimentario y, por tanto, se convierte en una opción sostenible que se adapta a las diferentes legislaciones a nivel europeo. Los nuevos envases se convierten en una opción conveniente especialmente dirigidas a envasar alimentos que requieran packaging termosellable, de alta transparencia y con una óptima barrera como lácteos, hummus, guacamole, frutos secos o dulces.
Este proyecto de innovación fue presentado en Fakuma y permitirá a ITC ofrecer envases de alta transparencia, gran flexibilidad y peso optimizado. Este desarrollo ha sido posible gracias a una fructífera colaboración con BMB SpA y Novapet.
Grupo ITC fabrica envases de plástico (PP, PET y PS), principalmente, para el mercado alimentario y, en menor mendida, cosmética, pinturas o detergentes. Especializado en la tecnología IML para la decoración de los envases, también ofrecen la posibilidad de decoración Sleeve, PML o Serigrafía y dispone de una gama de productos de alta barrera basadas en una solución a través del etiquetado IML con EVOH sobre un envase de PP, lo que permite otorgar al envase una barrera al oxígeno y, dependiendo del producto, hasta triplicar la vida útil del contenido. Además de su central de Ibi (Alicante), donde se desarrolla esta tecnología, cuenta con una segunda planta en Sopelana (Vizcaya) dedicada a la fabricación por inyección de envases con 4.900 m2 de superficie, aproximadamente las mismas dimensiones que las instalaciones alicantinas.
Dispone de más de 50 máquinas de inyección y 10 de soplado y el pasado ejercicio alcanzó unas ventas de 78,1 M€, un 18% sobre los 66,2 M del año anterior, con exportaciones por valor de 16,4 M (tiene clientes directos en más de 30 países) y una plantilla del orden de los 300 trabajadores.