La facturación del centro tecnológico Tekniker, miembro de Basque Research and Technology Alliance (BRTA), despegó en 2023 con un crecimiento del 18% con respecto a 2022 y una facturación récord de 31,94 M€. De los ingresos, un 49,2% procedió de contratos con más de 200 empresas de sectores como el aeronáutico, la salud o el hidrógeno a través de la investigación y el desarrollo de soluciones de alto valor para abrir camino hacia una industria más inteligente y sostenible.
El centro aborda este reto a través de la integración de nuevos materiales, procesos, medios y sistemas para facilitar un modelo basado en la competitividad, la sostenibilidad y la economía circular. Para ello colabora con empresas ofreciendo soluciones en automatización y robótica, sensores y actuadores, diseño de superficies y materiales, mejora de componentes mecánicos y sistemas tribológicos, desarrollo de sistemas mecatrónicos, digitalización de procesos productivos y metrología industrial.
La participación y el liderazgo de proyectos de I+D+i enmarcados en programas competitivos del Gobierno Vasco (24,5%), del Estado (5,4%) y de la Unión Europea (17,1%) generó la otra mitad de los ingresos. En total, en 2023 Tekniker formó parte de 193 proyectos industriales y 53 proyectos con administraciones. Esta alta actividad investigadora generó 5 nuevas patentes y la creación de una nueva start-up europea centrada en la tribología, i-Tribomat.
Tekniker, organización orientada a la multidisciplinariedad, la excelencia técnica y al compromiso de sus profesionales, cuenta con personas con talento para transferir conocimiento y, en definitiva, contribuir a un mundo mejor y más amable. Al término de 2023, formaban parte del centro 279 personas con contrato. Asimismo, 33 personas en procesos prácticas realizaron su TFG y TFM en las diversas unidades tecnológicas como parte del objetivo de Tekniker en materia de cooperación educativa y transferencia de talento.
Fruto de su compromiso con la reducción de las emisiones tomó medidas críticas como la instalación de paneles fotovoltaicos en el edificio para reducir el consumo de energía externa en un 7% y llevó a cabo la actualización de su plan de movilidad para fomentar prácticas de transporte más sostenibles entre las personas.
Además, el centro tecnológico invirtió el pasado año cerca de 2 M€ para mejorar sus instalaciones y equipamiento. Destaca la apuesta por un nuevo espacio específico de electrónica impresa que ha contado con el apoyo de la Diputación Foral de Gipuzkoa, así como la apertura de un laboratorio para desarrollar y caracterizar recubrimientos resistentes a la corrosión a alta temperatura con la ayuda del Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno Vasco.