La aportación del interiorismo se muestra como un factor cada vez más crucial para una hostelería que busca satisfacer al nuevo cliente posCovid mediante la creación de momentos únicos y memorables. La adecuada conceptualización de la ambientación, el diseño, el elemento decorativo o el mobiliario crean las condiciones necesarias para que el hotel o el restaurante culminen con éxito su propuesta y, en última instancia, su rentabilización.