Alimarket: ¿Qué supondrá para la operativa logística tradicional la irrupción de la tecnología 4.0?
Francisco Aranda: La innovación es el eje fundamental de la logística y del transporte. El Big Data y el Internet de la Cosas (IoT) han dado un nuevo giro a nuestro sector y junto a los últimos desarrollos tecnológicos constituyen los pilares de la e-logistic. Gracias al Big Data se puede presituar un producto antes de su venta en un centro cercano a potenciales compradores, avanzando así hacia una logística predictiva. Se trata de reducir al máximo los stocks aumentando las frecuencia de reparto y distribución. Todo ello, facilita la personalización al máximo nivel de los productos y servicios. También supone un verdadero cambio en la concepción del trabajo.
A.: ¿En qué medida afectarán esos cambios a la situación laboral del sector?
F.A.: A día de hoy, la logística y el transporte ofrecen una importante oferta de puestos de trabajo, muchos de los cuales cuesta bastante cubrir. Algunas empresas están optando por incorporar recursos humanos de otros países ante la dificultad de encontrar determinados perfiles en España. La digitalización no elimina trabajo, sino que lo transforma y abre hueco a nuevos perfiles profesionales. La formación es la herramienta más importante para la creación de empleo en la nueva era digital y no se está ofreciendo la que requieren las empresas.
A.: ¿Cómo imagina el futuro del sector logístico?
F.A.: Creo que lo más destacable es que el comercio electrónico se disparará, de manera que la distribución urbana de mercancías se multiplicará y la logística será el referente que sostenga todo este sistema. Para ello, se necesita una normativa armonizada de distribución urbana, algo que hasta ahora no tenemos, porque son los ayuntamientos quienes tiene la potestad regulatoria y cada uno fija unas condiciones distintas en sus ordenanzas. A la hora de elaborar ese marco es imprescindible contar con el sector logístico, que es el que está trabajando a diario sobre el terreno. El desarrollo de cualquier esquema de movilidad requiere trabajar junto a los sectores afectados sobre la dimensión ambiental, económica y social. Por eso, desde UNO elaboraremos una guía de buenas prácticas para la distribución urbana de mercancías y demandamos la creación de un marco general sobre el que se apoyen las ordenanzas municipales. Por otra parte, hemos solicitado al Fomento una reforma de los códigos postales. Se trataría de incorporar tres dígitos más a los actuales, como han hecho otros países. De esa forma podríamos geolocalizar un portal concreto, lo cual ayudaría a descongestionar las ciudades y favorecería el medio ambiente. Por último, UNO va a crear una Escuela de Repartidores que permita a los conductores ofrecer el servicio que demanda el mercado.