La luz azul alimenta el miedo al envejecimiento de los jóvenes
A todos los jóvenes les encantan los smartphones, ya sea para navegar por Instagram o para hacer compras online, pese a que sus usuarios se ven expuestos a los efectos de la luz visible de alta energía (luz HEV, por sus siglas en inglés) o “luz azul” durante largos periodos del día. Esta no solo puede elevar los niveles de estrés al provocar trastornos del sueño, sino que también afecta a la piel. Los estudios científicos han demostrado que la exposición a la luz azul y violeta reduce los niveles de carotenoides (antioxidantes) en la piel y produce hiperpigmentación en las pieles de tipo III-IV (tonos marrones claros e intermedios) en mayor medida que la radiación ultravioleta (UV) B. Por consiguiente, cabe esperar que una fuerte exposición a la luz HEV acelere los cambios de pigmentación en la piel y la aparición de líneas de expresión y arrugas.
La lucha contra los efectos perniciosos de la luz azul sobre la piel ofrece a las marcas de cuidado de la piel y suplementos de belleza la oportunidad de copromocionar los beneficios del uso tópico y sistémico de carotenoides naturales y extractos ricos en carotenoides para la salud dermatológica.