El sector de detergentes ha sido históricamente uno de los más dinámicos, dadas las amplias posibilidades de innovación que presenta, y es uno de los mercados que cuenta con mayor número de referencias. Por otra parte, en la actualidad el segmento se encuentra bajo la sombra de la desconfianza, al haberse conocido, hace tan solo un par de meses, un pacto ilícito entre las principales compañías del sector en materia de precios. Desde que el 27 de febrero de 2008 la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) pusiese en marcha el programa de clemencia como aliciente para la denuncia de la existencia de este tipo de pactos, se han sucedido diversos casos en el seno de la No Alimentación. Entre ellos, el destapado por Henkel en el mercado que nos ocupa, que se libró de la multa, amparada por la vía de la clemencia, que recompensa a las empresas que hayan tomado parte en los mismos y sean las primeras en denunciar los hechos eximiéndolas de sanción alguna.
Los pactos, relativos a la categoría de detergentes en polvo para el lavado a máquina, existieron al menos entre enero de 2002 y marzo de 2005 y comenzaron a partir de una iniciativa de las compañías para mejorar acciones medioambientales en este sector que, sin embargo, y según apunta la Comisión, no requería coordinar precios ni acometer otras prácticas contra la competencia. En la imposición de la sanción, el organismo determinó una multa conjunta de 315,2 M€ a Procter & Gamble (211,2 M) y Unilever (104 M) por llevar a cabo, junto a Henkel, un cártel en detergentes en ocho mercados europeos (España, Portugal, Bélgica, Francia, Alemania, Grecia, Italia y Holanda), aunque la resolución estableció una rebaja del 10% en las sanciones a ambas multinacionales por reconocer los hechos y posibilitar una pronta resolución de la investigación.
Los líquidos, imparables
Aún es pronto para saber si los consumidores castigarán a las compañías implicadas tras el conocimiento de estas prácticas ilícitas. Entretanto, la evolución del segmento de detergentes, según indican los datos de Iri para el TAM abril 2011, muestra una reducción tanto en volumen como en valor, con un descenso del 1,7% y 1,6%, respectivamente. Una vez más, los detergentes líquidos prosiguieron su avance en casi todas las categorías. En los utilizados a máquina, los líquidos sumaron los cuatro puntos que retrocedieron los detergentes en polvo en volumen y los casi cinco puntos que descendieron en valor, para convertirse en los utilizados por más de la mitad de los consumidores. También en los detergentes para prendas delicadas el líquido se erige como el preferido por los consumidores. Por su parte, el polvo queda relegado a tener éxito únicamente en el lavado a mano, categoría que sigue siendo minoritaria y en la que duplica a los líquidos en valor y casi los triplica en volumen.
Precisamente el formato líquido es el que se ha mostrado más activo en los últimos tiempos, auspiciado por las numerosas posibilidades que ofrece en cuanto a sostenibilidad y beneficios a través de nuevas tecnologías de lavado. El lavado a baja temperatura, detergentes más sostenibles para el medioambiente y productos más respetuosos con las personas son algunas de las tendencias que han seguido las fabricantes de detergentes en los últimos años. La búsqueda de mayor efectividad y respeto medioambiental llevó a Unilever a recuperar un formato extendido en otros mercados europeos y utilizado en el mercado español de limpieza industrial con el que la multinacional ya hizo un primer intento, sin éxito, en 2002: el hidrosoluble. Así, a finales de año lanzó ‘Skip Pequeño & Poderoso Cápsulas’, un detergente superconcentrado en cápsulas monodosis. Esta presentación ya existe en el mercado español, aunque aún son pocas las marcas que la comercializan, pero su uso podría extenderse en los próximos tiempos. De hecho, empresas como Careli, con su marca ‘Flopp’; Reckitt Benckiser con ‘Colón Cápsulas’, o AC Marca con ‘Norit Cápsulas’, operan en esta categoría. Respecto a Unilever, la compañía está desarrollando en la fábrica que opera en Aranjuez (Madrid) un plan inversor por valor de unos 5 M, orientado a la readaptación de su oferta en función de las necesidades del consumidor y su programa de sostenibilidad. Así, próximamente verá la luz una nueva presentación de su suavizante ‘Mimosín’, al tiempo que la firma ampliará, en 2012, su gama de detergente líquido ‘Skip’ con dos nuevas variedades: diluido y concentrado. Finalmente, la multinacional tiene en fase de instalación una línea para ‘Skip’ en polvo que permitirá un ahorro en el proceso productivo.
También en líquidos han ampliado su oferta Henkel y Químicas Oro. La multinacional presentaba, el pasado marzo, ‘WiPP Express Blanco Total’, para una colada más blanca, gracias a su fórmula enriquecida con ingredientes blanqueantes. Por su parte, la fabricante de San Antonio de Benagéber (Valencia), ha lanzado la gama ‘Oro Basic’ en las variedades marsella, color, aloe vera y prendas delicadas. Inmersa en la mejora de la capacidad productiva de envasado de aerosoles, lo que conllevará un desembolso de unos 600.000 € que se sumarán a los 1,7 M destinados a finales de año para la ampliación de su superficie en 3.000 m2, la compañía fabrica 13.500 t de detergentes. Este producto le reportó el pasado año unos ingresos de 9 M€, en torno al 30% de su cifra de negocio total.
Los detergentes “de siempre”
A lo largo del último lustro, el segmento de detergentes ha estado repartido entre las principales enseñas propiedad de multinacionales y las marcas de fabricantes nacionales con larga trayectoria en el mercado español. Sin embargo, la vuelta a lo “retro” que parece invadir la mayor parte de los sectores económicos, con el lanzamiento de nuevas versiones de antiguos productos, ha dado lugar a la aparición, también en detergentes, de marcas que antaño tuvieron buena acogida entre los consumidores. Los primeros en volver a escena fueron ‘Bilore’ y ‘Mini2’, enseñas con más de un siglo de historia que habían permanecido fuera de los lineales durante casi ocho años, tras el cierre, en 2003, de la fabricante Bilore. En esta ocasión, los productos se comercializan de nuevo fabricados por la bilbaína Manufacturas Garcoi. Entre las primeras referencias presentadas, destaca el detergente ‘Mini2’ en bolsas hidrosolubles en las variedades todo tipo de ropa, ropa de color y con aroma marsella, además de una gama de productos ‘Bilore’, formada por detergentes, suavizantes, lavavajillas y limpiadores de hogar.
Desaparecida del mercado desde que su propietaria, Químicas Alfonso, cesase actividad, la marca de detergentes ‘Viker’ también ha regresado a los establecimientos, esta vez de la mano de la fabricante Industrias Químicas Gomis. La productora, que explotará la marca mediante un contrato de licencia, ha presentado una nueva gama formada por un detergente concentrado, otro para prendas delicadas, un detergente con suavizante y uno adecuado para el lavado de ropa de bebés respetuoso con las pieles sensibles. Además, entre las innovaciones que Gomis ha aplicado a ‘Viker’ destaca la sustitución del tradicional envase en bolsa de plástico del detergente concentrado, apto tanto para el lavado de ropa y como para la limpieza del hogar, por una botella de 150 gramos, más manejable y con menos riesgo de pérdida de producto.
Finalmente, el grupo Sosmi, fruto de la adquisición, en septiembre de 2009, de Sosmi -especializada en limpieza industrial- por parte de Industrias Químicas Fons -dedicada a productos de limpieza y cuidado personal- ha recuperado de la memoria la marca ‘Tu-tú’ en su estrategia de fomentar su línea de negocio doméstica. Hasta el momento, esta enseña, popular en los años cincuenta, contaba con dos referencias dentro del catálogo de Sosmi, a las que suma ahora cuatro nuevos productos: un detergente concentrado que se presenta en envase en bolsa de plástico de 150 gramos, un detergente con suavizante, otro para el lavado de lana y prendas delicadas y un detergente para ropa de bebé y pieles sensibles.
E.C.