La apuesta de Cosmo International Fragrances por el centro productivo de Granollers es un hecho. La multinacional acaba de inaugurar la ampliación y rediseño de esta planta, en la que decidió concentrar la producción de esencias para la perfumería hace tres años, para implementar su nuevo plan estratégico para 2024. Así, la fábrica alcanza ahora los 7.000 m², y en ella se ha instalado un nuevo sistema robótico de preparación de compuestos que permite multiplicar por cuatro la capacidad de producción en todas las categorías, “con una tasa de automatización del 75%”.
Además de apostar por la tecnología, la planta utiliza energía verde y sostenible a través de un techo de paneles solares y electricidad de bajo consumo. Además, ha puesto a disposición estaciones de carga para vehículos eléctricos y un sistema de recolección de aguas residuales industriales. Y todo ello en una fábrica renovada también desde el punto de vista estético, gracias al trabajo del arquitecto Charles Berthier. “El edificio está inspirado en las embarcaciones de navegación”, explican.
Todo ello ha supuesto una inversión de 10 M€. Hay que señalar que hace un año, la compañía también abrió nuevo centro creativo en el barrio de Gracia, en pleno centro de Barcelona. Se trataba del tercero de la multinacional, al disponer operativos otros dos en Miami y París. En términos económico, la compañía facturó 20,69 M€ en 2021, un 18% menos respecto al periodo anterior. La empresa, con una trayectoria de 40 años en la industria de las fragancias, fabrica aceites de perfume para fragancia fina, cuidado personal, cuidado del hogar y ambientación, que comercializa tanto a marcas independientes como a multinacionales.