La evolución del sector de Perfumería y Cosmética ha dejado atrás de forma definitiva la crisis provocada por el coronavirus. Esta es una de las principales conclusiones de los datos de crecimiento presentados por la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa) dados a conocer ayer, 13 de abril. Baste decir que en 2022 el mercado facturó 9.249,78 M€, un 11,3% más que en 2021. Y lo que es más relevante si cabe, superó en un 9,3% las ventas registradas en 2019, año previo al inicio de la pandemia y que marcaba hasta ahora el pico de la serie histórica con 8.460,92 M. Tal como apuntan desde la Asociación, esto "nos lleva a situar 2022 como nuevo marco de referencia sobre el que comparar el comportamiento del sector en años venideros".
Un marco de referencia que, eso sí, se establece en medio de una coyuntura de incertidumbre económica marcada por la inflación y los efectos de la invasión de Ucrania, comenzando por una crisis energética, que sumados a los de la vuelta a la normalidad tras el parón forzado a resultas de la pandemia, también han repercutido seriamente en la cadena de suministro. Con todo ello, continúan, "el consumo per cápita ha alcanzado un nuevo techo, aproximándose a los 185 euros por persona y año, con lo que no solo se han superado las cifras de 2021, sino muy significativamente, también los 170 euros alcanzados en 2019".
En cuanto al futuro, la definitiva estabilidad recuperada tras la pandemia, pero también la compleja coyuntura actual, hacen mirar al futuro "con optimismo pero también con mesura". De ahí que "no sería realista prever variaciones tan acusadas, con subidas y descensos que han llegado a alcanzar porcentajes de doble dígito, de cara a próximos ejercicios", según han indicado desde Stanpa.
La evolución positiva ha alcanzado a todos los segmentos que componen el sector, con especial mención para la cosmética de color (920,57 M€), con un incremento cercano al 30%, y del 8,7% respecto a 2019, resultado tanto de la eliminación del uso de mascarillas como de una mayor sofisticación y autocuidado por parte de las consumidoras. También en el doble dígito, rozando el 20%, se ha situado Perfumes y Fragancias (1.736 M€), seguido del 9,06% del Cuidado de la piel (2.967,47 M€) y del 7,04% de los Productos para el cabello (1.651,59 M€). Aseo e Higiene, con 1.973,77 M€ facturados, se ha situado en el 4,54% de crecimiento.
Tal como ha comentado Val Díez, directora general de Stanpa, los datos reflejan el éxito del sector en 2022 y la vuelta a la intensidad de una vida que necesita de autocuidado y bienestar, en el que la perfumería y la cosmética han cobrado un papel importante para los ciudadanos. En esta línea también se ha expresado Eva Magriña, directora general de AC Marca Personal Care, que ha apuntado al covid como "un catalizador de nuestra industria, ya que nos hizo darnos cuenta del valor de nuestro aspecto, pero también de la salud de nuestra piel. Porque no solo somos belleza; con nuestros productos también contribuimos a la salud y al bienestar, tanto físico como mental”. Por su parte, Óscar Mateo, director de Conocimiento y Estudios de Mercado de Stanpa, ha destacado que “lo extraordinario de este crecimiento en la coyuntura actual es difícil de explicar. Algunos datos nos reflejan que tiene que ver con una fuerte necesidad de los consumidores de recuperar el bienestar, de cuidarse más y de disfrutar de la vida social y la autoestima”.
No solo se ha incrementado el consumo de las categorías de producto; también los canales a través de los cuales se distribuyen, que han experimentado una evolución igualmente dinámica, con crecimientos a dos dígitos en la práctica totalidad de categorías. Así, el canal de gran consumo (4.324 M€€) arroja un crecimiento del +13%, el selectivo (1.938 M€) un 18,2% y la farmacia (1.797 M€) un 6,3%. A estos canales, los de mayor crecimiento, han seguido la peluquería profesional, la venta directa, la estética profesional y los pure players. En este contexto, hay que destacar que mientras el offline ha situado su evolución en el 11,9%, el canal online ha registrado un ligero descenso del 0,5% en términos globales. La vuelta a la tienda física, a la importancia de la experiencia de compra en el punto de venta es una realidad. Pero la evolución plana del ecommerce (y su crecimiento del 67% respecto a 2019) también constata que es una vía de consulta, conocimiento y compra de repetición por parte del cliente. Actualmente, este canal representa el 9,4% sobre el total del sector, según los datos de la Asociación.
España es un actor relevante en el panorama internacional. El sector alcanzó en 2022 los 6.515 M€ en exportaciones, un 21% más que en 2021 y un 25% más que en 2019. La perfumería (+27%) sigue siendo la primera categoría de exportación, representando un 40% del total de exportaciones, si bien cabe destacar que todas las categorías han crecido en comparación con 2021. Tal es así que el incremento de cosmética de color, aseo e higiene personal y cuidado de la piel también ha rondado el 20% en todos los casos, mientras que cuidado del cabello ha crecido al 14%.
De este modo, España registra una balanza comercial positiva desde 2006, con un saldo de casi 1.900 M, y se mantiene entre los 10 principales exportadores mundiales de productos de perfumería y cosmética, consolidándose como cuarto mayor mercado de la UE. Es, además, el segundo exportador mundial de perfumes, solo por detrás de Francia y por delante de Alemania y Estados Unidos. "España exporta más perfumes, cosméticos y productos de cuidado personal que vino, calzado o aceite de oliva”, ha apuntado Díez. “Eso nos indica la competitividad y excelencia de la industria de la perfumería y cosmética en España, que sigue creciendo de forma imparable año tras año, batiendo todos los récords”.
En la evolución del sector influyen, tal como han comentado diferentes profesionales del sector presentes en el evento de Stanpa, la apuesta por la inversión en I+D+i y la innovación, no sólo a nivel de producto sino también de sostenibilidad, así como la competitividad de España. El vicepresidente de Stanpa y presidente de Cantabria Labs, Juan Matji, ha definido el último ejercicio como el año de la “tormenta perfecta”, en referencia a un periodo “marcado por una crisis de suministros y energética que ha hecho que la industria haya tenido que reaccionar de una forma eficaz”. Una reacción exitosa, a tenor de indicadores como la visibilidad de la industria española en el mundo ejemplificada en un cambio de tendencia claro: “Ahora cuando viajamos es muy difícil no encontrar productos españoles de perfumería y cosmética, y esto es un indicador de que España es competitiva porque tiene innovación y personal altamente cualificado, lo que hace que tengamos una buena industria cosmética, pero también otras industrias de mucha calidad que abastecen a la cosmética”.