La compañía Becton Dickinson , filial del grupo norteamericano homónimo, tiene previsto destinar 46 M€ a la ampliación de su planta de Fraga (Huesca) . El proyecto, que ha sido declarado de interés autonómico por parte del Gobierno de Aragón, consiste en la construcción de un edificio de más de 5.600 m2, que permitirá ampliar la zona de esterilización y alojará tres nuevas líneas de 'PosiFlush' , una jeringuilla cargada con una solución salina estéril destinada a la limpieza de las vías intravenosas.
En la actualidad, tan solo una planta estadounidense de Becton Dickinson tiene líneas para la fabricación de este producto, cuya demanda se estima que seguirá incrementándose en 373 M de unidades para los próximos cuatro años. Por ello, Fraga ha sido el emplazamiento elegido por el grupo para la instalación de estas nuevas líneas de producción, que permitirán a la filial española llegar a nuevos mercados y mejorar su competitividad. Igualmente, la inversión permitirá ampliar la plantilla del centro con la creación de 45 nuevos puestos de trabajo.
Becton Dickinson está especializada en la fabricación de productos hipodérmicos desechables, incluyendo jeringuillas para insulina. También cuenta en su cartera con catéteres intravenosos, productos de quirófano y anestesia, bombas de infusión, material para nutrición parenteral, etc. Además de la planta de Fraga, el grupo dispone de otras instalaciones productivas en San Agustín de Guadalix (Madrid) y dispone de una plantilla de casi 1.000 trabajadores. En su último ejercicio, cerrado en septiembre de 2013, la filial española registró ingresos de 239,5 M€ (-2,3%), con beneficios de 20,31 M€ y unos fondos propios de 221,16 M.