El año 2013 comenzó con precios superiores a los de temporadas anteriores tanto en aceite de oliva como de girasol. En este último, dicho nivel tarifario obedecía a una cosecha de pipas muy mermada en 2012 a nivel mundial y, particularmente, en España. En nuestro país, la producción de esa oleaginosa fue aquel año de sólo 619.000 t, frente al volumen de 1,08 Mt de 2011 y de 846.900 t en 2010, según los datos del Ministerio de Agricultura (Magrama). El alza de precios, que IRI cifraba (en pvp) en un 18,5% en retail en el acumulado anual hasta noviembre de 2012, fue un efecto llamada para nuevas plantaciones en nuestro país. De ese modo, en 2013 se volvió a alcanzar una cosecha nacional de 850.000 t, mientras la producción global registró un récord de 42 Mt. De ese modo, en el mes de agosto, las tarifas del aceite de girasol iniciaron una nueva línea de descenso.
A falta de los datos concretos sobre la evolución en el mercado final de los precios del aceite de girasol desde el verano, la estadística del Magrama del periodo anual junio 2012-julio 2013 recoge un incremento del 2,6%. Y en el canal de la distribución moderna, el aumento tarifario se cifró en el 2,4% entre octubre de 2012 y septiembre de 2013, a la luz de los datos de IRI.
Resultan antagónicos los resultados sobre la marcha de ese aceite, en términos de volumen, extraídos de las respectivas estadísticas del Ministerio y la consultora. De hecho, para el Ministerio, el consumo hogareño de la línea se elevó un 5,7% en el acumulado anual hasta julio de 2013 y un 8,5% en el acumulado hasta septiembre, este último saldado con un volumen de 165,99 Ml. Para ese mismo periodo (octubre 2012-septiembre de 2013), IRI recoge una disminución de las ventas de girasol en retail del 1,2% y un resultante de 161,63 Ml.
El aceite de girasol es la principal categoría de un segmento, el de aceite de semillas, que registró un incremento total del 7,2% en el periodo de doce meses hasta junio y un 9,9% en el acumulado anual hasta septiembre, conforme a los datos del Magrama. En retail, el mejor comportamiento del resto de aceites de semillas, en relación al girasol, propició un incremento comercial en el conjunto de la gama del 0,3% -hasta 183,19 Ml- en la anualidad hasta septiembre.
En la actividad nacional de extracción y refinado de aceite de semillas intervienen grandes multinacionales, como Cargill y Bunge, y otros grandes grupos de propiedad nacional-ibérica, encabezados por Migasa y Sovena y con su eje estratégico en el embotellado.
Moltuandújar amplía su dotación industrial y actividad
Precisamente, la sociedad de capital portugués, Sovena, elevó en 2013 de modo relevante sus ventas de aceites de semillas a granel, que realiza casi en su integridad en España. De hecho, ese negocio pasó de 49,7 Ml en 2012 a 76,8 Ml.
Para la producción y refinado de aceite de girasol, el interproveedor aceitero de Mercadona cuenta, desde enero de 2013, con una segunda factoría, situada en Andújar (Jaén) e incorporada merced a su asociación con Deoleo, en la sociedad Moltuandújar. Dicha empresa fue creada entonces al 50% por ambos grupos y asumió los activos y actividad de fabricación y preparación de aceite de girasol de la fábrica. Después, en mayo de 2013, Moltuandújar añadió el área de embotellado, a la vez que la presencia de Sovena en la sociedad se elevó del 50% al 70%. Entonces, se pactó ya el paso del actual 30% de Deoleo a la filial del grupo Nutrinveste, en un plazo de siete años. A lo largo de esa asegunda fase abierta en mayo -en la que Sovena pasará del 50% al 100% de Moltuandújar-, el suministrador de Mercadona pagará a Deoleo un total de 7,1 M€. Ese importe elevará a 11,6 M€ la cuantía total por la transferencia del complejo jienense, pues el primer traspaso implicó un desembolso de 4,5 M€.
Sovena, que explicó su entrada en la factoría de Andújar por sus necesidades de suministro para Mercadona y para el mercado exterior, ha hecho renacer la actividad de un complejo que estaba abocado al cierre. Desde la entrada de la sociedad de capital luso, Moltuandújar ha invertido 3,5 M€ (1 M€ en una presa y 2,5 M€ en el área de embotellado). Ahora, la sociedad prepara la instalación de una caldera de vapor en el área de refinación, presupuestada en 2,5 M€, y el montaje de un nuevo cocedor.
Moltuandújar produce, refina y embotella aceite de girasol a maquila para Sovena, primer comercializador de ese tipo de aceite en envasado en el mercado nacional, y Deoleo, ésta ahora en la quinta posición, según los datos recabados por Alimarket. Sin embargo, Deoleo es la primera compañía marquista de esa línea en retail. Su participación (entre ‘Koipesol’, ‘Elosol’ y ‘Ucasol’) pasó del 9,5% en el acumulado anual hasta septiembre de 2012 al 7,1% en el periodo anual posterior. Esa pérdida de peso se debió a un retroceso comercial del 27,3%, debido fundamentalmente a ‘Koipesol’, según los datos de IRI. Así, la cuota de dicha marca retrocedió del 8,8% al 6,2%.
En el lado contrario, sumó volumen y cuota la principal enseña de girasol del grupo Acesur. De hecho, ‘Coosol’ incrementó un 24,3% su venta en la distribución moderna, de modo que su participación se elevó del 2,4% al 3%. Ese repunte pudo verse favorecido por la innovación llevada a cabo por la marca, un desarrollo materializado en el lanzamiento, a finales de 2012, de una gama segmentada, según usos (tradicional, especial freir, repostería y congelados).
Esas reducidas cuotas de los dos líderes marquistas -Deoleo y Acesur- de la venta de aceite de girasol en la distribución organizada, dentro de una actividad -la comercialización nacional de embotellado- con un menor número de operadores que el negocio de oliva, se explica por el gran peso de las marcas de las cadenas, que deja un escaso espacio a las marcas de los embotelladotes. De hecho, las MDD acapararon en 2013 el 85,4% de las ventas de girasol en retail, tras ganar 1,8 puntos, conforme al estudio de IRI.
Y Cargill Oil cerró
Del análisis de la evolución del mercado español de aceite de semillas en envasado en los dos últimos años se extrae, a nivel empresarial, además del ascenso de Sovena y la contracción de Deoleo, el notorio impulso de Aceites Toledo y el retroceso de Cargill. El grupo toledano elevó su volumen en el mercado nacional de 3,8 Ml en 2011 a 11,1 Ml en 2012, para retroceder levemente, hasta 10 Ml, el último año.
En cambio, la comercialización de girasol embotellado de Cargill en España sufrió un notorio descenso en 2012, al pasar de 40,6 Ml a 28,5 Ml. Aún así, el grupo se mantuvo ese año en el tercer puesto, tras Sovena y Acesur. Por eso, resultó sorprendente el anuncio -en enero de 2013- del cierre de su planta de molturación, explotada por la matriz española, y de su planta de embotellado, ésta a cargo de la filial Cargill Oil Packers.
Esa decisión, que llegaba a la cabecera española procedente de la dirección de la multinacional norteamericana, era explicada por “el exceso de capacidad de molturación y embotellado en el sur de Europa, por el declive de las cosechas locales y por la fuerte competencia en el este de Europa”. Así, el cierre de las dos mencionadas instalaciones sevillanas fue acompañado de la decisión del grupo Cargill de realizar una fuerte inversión, de 530 M$, para construir un macrocomplejo aceitero en Rusia e instalaciones portuarias en el Mar Negro.
A diferencia de la actividad de embotellado de aceite de oliva que mantiene en España, desempeñada por su participada Mercaóleo, la mencionada operativa de envasado de girasol de Cargill se dirigía al mercado nacional. Esa comercialización de girasol embotellado por Cargill Oil Packers tenía como clientes, en su última fase, a grandes cadenas de retail y horeca: Carrefour, Lidl, Dia, Aldi y McDonald’s. Con su abandono, la actividad aceitera del grupo Cargill en España se ha reducido a la aludida Mercaóleo, a la planta de molturación de soja en el puerto de Barcelona y a su refinería de aceite de girasol, alto oleico y soja de Reus (Tarragona).