El pescado ahumado se posiciona ya como “producto delicatessen accesible” y poco a poco se desprende del cartel que lo calificaba de “producto de lujo”. En este cambio de percepción, al que ha ayudado la MDD, las principales enseñas se centran en la búsqueda de nuevos mercados, el lanzamiento de nuevas gamas de producto o presentaciones para continuar potenciando el mercado.