La intención de gasto en alimentación de los hogares españoles para las próximas Navidades ha retrocedido un 0,4% , una caída apenas significativa pero que destaca porque es la única partida del presupuesto previsto que retrocede. Según el estudio de consumo navideño que publica Deloitte anualmente, el gasto extra de los hogares españoles para este periodo será de 684 € de media ; un 9,8% más respecto al año pasado que, a su vez, es una proporción muy superior al 4% previsto de media en los países europeos. Regalos (12%), ocio (10,65) y viajes (25,25%) crecen a doble dígito pero la alimentación cae de los 209 € que se esperaban para 2014 a 208 €, quedando al margen de la mejora del optimismo nacional. Según Victoria Larroy, socia de Deloitte, este comportamiento se debe al estancamiento de los precios del sector y a que, ante una mejora en la percepción de la renta disponible, el consumo fuera del hogar produce cierto desplazamiento del consumo en el hogar.
Alimentos, en el híper
Las compras de alimentación y regalos ocupan tiempos y espacios diferentes. Los grandes almacenes se consolidan como la primera opción para la compra de regalo, elegida por el 31% de los hogares (28% en 2014), mientas que hipermercados y supermercados han visto reducida su cuota del 25% al 21%. Los híper, en cambio, absorben la mayor parte de las compras de alimentación. Si bien pierden algo de relevancia, estas grandes superficies son el establecimiento preferido por el 62% de los encuestados para la compra de alimentos . Asimismo, un 44% comprará en establecimientos de gran descuento y otro tanto en supermercados. Un 36% consumirá en el comercio tradicional (y otro 22% en "otro comercio minorista") mientras que solo un 5% cuenta con adquirir algún tipo de alimento en tiendas de lujo. Un 9% de familias hará uso de la distribución online .
De hecho, la categoría reina para la compra presencial es alimentación y bebidas, a gran distancia de las demás en todo lo relacionado con la búsqueda online de ideas y precios. Ver y tocar sigue contando mucho en la adquisición de estos productos. Sin embargo, la posibilidad de realizar un pedido online dentro de una tienda física está adquiriendo importancia. Esta integración, fundamental para los consumidores que no quieren elegir un canal u otro, permite conciliar ventajas como la búsqueda de asesoramiento presencial y el envío a domicilio, y a las tiendas les permite gestionar mejor su inventario. Es una de las peticiones que los consumidores hacen al distribuidor, como otras clásicas del canal offline, como precios más bajos o mejor servicio, mientras que otras como los servicios de empaquetado o la decoración cada vez preocupan menos a los consumidores españoles.
Optimismo
Como otras características distintivas de la reactivación del consumo, el estudio de Deloitte también ha detectado descensos en el número de españoles que pedirán un crédito y en el número de compras de segunda mano. Sin embargo, esto no quita para que se olviden algunos hábitos adquiridos en los años más duros de crisis , como la búsqueda del mejor precio, rebajas y promociones, preparación de un presupuesto y uso de tarjetas de fidelización.
Con esta mejora de las previsiones, España se sitúa quinta en la clasificación de los diez países con mayor presupuesto de entre los participantes en el estudio, colocándose incluso por encima de Alemania. El 63% de los españoles encuestados considera que la situación económica de España es estable o ha mejorado durante 2015 y un 66% cree que que esta tendencia se mantendrá en 2016. Respecto a la percepción personal, un 67% considera que su situación se ha mantenido estable o mejorado durante el año, y un 76% cree que lo hará en 2016.
