Las grandes superficies comerciales, así como los centros de producción de empresas del sector del gran consumo registran gastos muy elevados en electricidad, en su mayoría provenientes de la iluminación para crear ambientes óptimos y mantener sus productos en las mejores condiciones. Por este motivo, muchas las empresas están invirtiendo en la renovación de sus luminarias, sustituyéndolas por LED, logrando con ello ahorrar en gastos de mantenimiento y consumo eléctrico. Las escasas emisiones de CO2 que emite la tecnología LED, su larga vida útil, eficiencia a la hora de mantener los alimentos en las mejores condiciones y ahorro en la factura energética son solo algunas de sus ventajas. En resumen, ya es posible afirmar que el empleo del LED en fábricas y establecimientos es una opción prácticamente consolidada.
En la distribución moderna, las grandes cadenas ya no conciben una nueva tienda sin este tipo de iluminación. Así por ejemplo, Carrefour presentaba el modelo premium de su hipermercado ‘Carrefour Express’ en Madrid como una tienda que destaca por los acabados, en los que se ha recurrido al LED para iluminar techos y muebles de frío, consiguiendo con ello resaltar los productos, gran parte de ellos de alta gama.
Mientras tanto, DIA destinaba casi 8 M€ a dos proyectos de sustitución de iluminación tradicional por bombillas LED y de renovación de equipos de frío. En el caso de la iluminación, instalaba más de 96.000 tubos de LED en las más de 360 tiendas adquiridas al grupo El Árbol. Uvesco también diseñaba su nuevo BM con medidas eficientes, en las que destaca sobre todo el uso de bombillas y fluorescentes con tecnología LED. Lidl hacía lo propio con su establecimiento de Puertollano (Ciudad Real), que incluye LED en todos sus puntos de luz.
En la industria alimentaria, dentro de esta área de iluminación destacan las inversiones de Delaviuda, Naranjas Torres y Vegañada, entre otras empresas. La fabricante de dulces de Navidad destinaba 30.000 € al cambio de 1.400 tubos fluorecentes, medida con la que estima una reducción del 50% del consumo energético en iluminación y otro 50% en potencia eléctrica contratada. Además, en la zona de picking se ha reemplazado el alumbrado de bombillas de vapor de sodio por campanas de alto rendimiento de tecnología LED, pasando de 400 W a 180 W, con un incremento del nivel de iluminación en el plano de trabajo.
La empresa de cítricos Naranjas Torres también ha iniciado la renovación de sus sistemas de iluminación, proyecto en el que prevé invertir una partida aproximada de 200.000 €. Mientras, la hortofrutícola Vegacañada destinaba gran parte de los 500.000 € invertidos en el último año en eficiciencia energética a la incorporación de luminarias con tecnología LED.