Los avances tecnológicos, la normalización del ecommerce y el cada vez mayor uso del móvil como herramienta de consulta y compra ha hecho que tanto los consumidores como las empresas se encuentren cada vez más cómodos con las iniciativas de comercio híbrido, dejando claro que el futuro del comercio es la fusión de lo físico y lo digital, según constata un estudio realizado por ICEMD, el Instituto de la Economía Digital de ESIC Business & Marketing School, en colaboración con Coolhunting Group.
El citado informe identifica cinco tendencias emergentes de la transformación digital en el sector retail, siendo una de ellas, la automatización de los procesos en fábricas y almacenes, algo que no es nuevo, pero que, sin embargo, la convergencia del mundo físico y digital, junto con la incorporación de la inteligencia artificial y otras tecnologías disruptivas, están transformando. Muestra de ello es que, hoy en día, los almacenamientos inteligentes y automatizados de los gigantes del comercio tienen el 70% de sus tareas hechas por robots.
Además, la digitalización ayuda a conseguir mayor seguridad y simplicidad en los procesos tanto de compra como de entrega o atención al cliente. Así, las empresas están cada vez más interesadas en ofrecer a sus clientes facilidad y conveniencia en el consumo, optando por conectar lo digital con lo offline. Soluciones como la realidad aumentada o la virtual permiten a los consumidores ver exactamente cómo se verá un determinado producto en su hogar o en su persona, utilizando poco más que la cámara de su smartphone. Son ya numerosas las startups que operan en China tiendas totalmente automatizadas y libres de personal y cajeros.
Por otro lado, el estudio señala que la posibilidad de un viaje totalmente personalizado del cliente "crecerá combinando herramientas de recopilación de datos que sean capaces de adaptar el contenido a sus experiencias móviles en la tienda, o en su hogar y ayudando a reducir la selección al recomendar productos adaptados a sus preferencias". En este sentido, las empresas de comercio electrónico y los minoristas de todo el mundo están integrando las compras online de manera más profunda en las tiendas físicas, como la tecnología del pago con móvil. Esta iniciativa permite obtener cada vez más datos de los consumidores y poder así ofrecer productos y ofertas personalizadas en el momento y lugar oportunos.
También se constata como tendencia la investigación de cómo las nuevas tecnologías pueden ayudar al cliente a obtener más valor, mientras éstos están cada vez más predispuestos a que dicha tecnología les sirva para conseguir productos y servicios personalizados. Además de los robots y las aplicaciones basadas en algoritmos, destaca el auge de las de reconocimiento de imágenes, los asistentes virtuales y los avances en lo concerniente a la compra por voz.
Por último, el mismo estudio señala que existe una tendencia del comercio tradicional a aliarse con las últimas soluciones tecnológicas. Así, la realidad virtual y la aumentada tienen el potencial de transformar la experiencia de compra a través de aplicaciones y experiencias en la tienda. Igualmente, un porcentaje cada vez mayor de los usuarios de dispositivos móviles los utilizan como asistentes de compra de determinados productos y servicios en las tiendas físicas. Esta tendencia se conoce como “showrooming”, cuando los clientes entran en las tiendas físicas para poder ver, tocar y probar los productos, para a continuación acceder a más información sobre precios y recomendaciones a través de sus smartphones.