El consumo de quesos en libreservicio llegaba a la crisis del Covid-19 con el viento de cara, consolidando su posición como primer lineal lácteo en la distribución organizada y respaldado por el consumidor en sus políticas de diversificación y estabilidad en el precio medio. Al cierre de 2020, esta oferta ha marcado unos registros de crecimiento inéditos en la serie histórica. El efecto Covid ha llevado el incremento de la demanda a una horquilla estimada de entre el 6% y el 7%, para rondar el 10% en términos de valor de mercado. En este contexto, la categoría estrella ha sido la de rallados, impulsada por el incremento de las comidas realizadas en casa durante todo el año. Así, la demanda de quesos rallados llegó a presentar incrementos superiores al 60% durante las semanas más duras del confinamiento domiciliario, manteniendo durante todo el año ratios de crecimiento muy por encima de sus números habituales, para llegar a diciembre registrando todavía una demanda superior en un 15% a la de hace un año.
Hablamos de un segmento que sigue prácticamente monopolizado por la oferta de las marcas de la distribución, que según los últimos datos disponibles de IRI coparían el 86,7% de la demanda y el 79% de su valor de mercado. Entre las marcas que todavía presentan una cierta relevancia encontramos a ‘El Caserío’, ‘Flor de Burgos’ o ‘President’.
Durante los últimos meses, este segmento se ha visto involucrado en algunos de los movimientos corporativos más trascendentes del ejercicio. En este sentido, a finales de enero Capsa tomaba un 50% del capital de Lácteas Flor de Burgos. La especialista en queso fresco, participada íntegramente hasta la fecha por la familia Angulo, es la octava compañía en el ranking de principales elaboradores y comercializadores de queso en España, tras haber firmado un salto en su actividad del 152% durante los últimos cinco años. Con este movimiento, Capsa daba un importante paso adelante para posicionarse como un actor de referencia en el pujante segmento quesero, donde su presencia venía siendo limitada hasta la fecha.
Otra operación importante fue la compra de la planta de Coop. Saiona por parte de Grupo TGT, firmada a finales del tercer trimestre. Esta nueva planta, la decimosegunda en su órbita, viene a reforzar el potencial de la quesera en queso tipo barra y sus formatos derivados, principalmente loncheados y rallados, que en algunos casos ya viene trabajando en las instalaciones de Hochland. La planta cuenta con un bagaje relativamente corto, ya que inició actividad en el último tramo de 2017, una vez que se finalizaba la inversión prevista para su puesta en marcha en el entorno de los 15 M€, convirtiéndose en unas instalaciones de referencia por su dotación técnica, y dimensionada para contar con un potencial productivo en el entorno de las 25.000 t anuales.
En este contexto, Mercadona volvía a mover ficha en su lineal de quesos. Durante la segunda mitad del año introducía como nuevo proveedor de queso rallado tipo emmental a la madrileña Lácteas del Jarama, que empezaba a suministrar en establecimientos de la Comunidad de Madrid su versión de emmental “100% de leche” en formato de 200 gr, bajo su enseña de referencia ‘Albe’. Según explicaban desde Lácteas del Jarama, el acuerdo con Mercadona contempla la progresiva expansión de la referencia a nivel nacional durante los próximos meses. De cara a este proceso de referenciación nacional, está previsto que el producto permute la enseña ‘Albe’ por ‘Hacendado’, pasando a integrarse en la oferta de marca propia de la cadena, tal y como sucede en el resto de su portfolio de rallado. Todavía no sabemos si la nueva referencia convivirá o viene a sustituir completamente en los lineales de la cadena al rallado emmental que actualmente suministra desde Francia la quesera Entremont Alliance, pero es seguro que, con este movimiento, Mercadona da un paso más en la nacionalización de su surtido más elemental en queso, sumando la producción procedente de la planta de Lácteas del Jarama en Fuente el Saz (Madrid) a una oferta capitalizada por los totalers Queserías Entrepinares y Quesería Lafuente, que firman el resto de referencias en rallado de sus lineales.
Por último, en materia de innovación de producto, el movimiento más destacados ha sido la entrada de García Baquero en alimentación vegetal. Así, a principios de verano lanzaba al mercado una referencia de queso vegetal en lonchas, para lanzar ya en noviembre la versión de rallado para su gama ‘VeganFeel’.