La llegada de los fondos NextGenerationEU a través del Perte Agroalimentario es una de las claves para el desarrollo, la evolución y el crecimiento de la industria ganadero-cárnica, tal como se analiza el último informe sobre tendencias en el sector cárnico de Alimarket. Por ello, no son pocas las empresas que han apostado por la colaboración para presentar proyectos en base a la normativa desarrollada, de cara a mejorar aspectos como la trazabilidad, el impacto medioambiental y la eficiencia operativa mediante herramientas y tecnologías de vanguardia.

En concreto, a mediados de marzo, la Oficina NextGen Agro de LLYC -en colaboración con FI Group y Laínez Biotrends- inscribió tres grandes iniciativas empresariales a la convocatoria de ayudas del Perte Agroalimentario ( dotado con 1.800 M€ tras la ampliación anunciada por el Gobierno tres meses después de su aprobación) a proyectos estratégicos para el desarrollo del sector. En total, estos tres planes activarían más de 120,7 M€ de inversión y favorecerían a 57 empresas de diversos perfiles dentro de la producción y comercialización cárnica. Cerca del 46% de las compañías asociadas a los proyectos son pymes, mientras que tres grandes grupos del sector del mercado nacional lideran estas iniciativas.

Las propuestas presentadas están conformadas por los denominados "proyectos tractores" dentro de los que se enmarcan "76 proyectos primarios vinculados a la digitalización, sostenibilidad y trazabilidad alimentaria". El alcance territorial de las inversiones se extiende a 11 comunidades autónomas con relevancia en la actividad de la cadena de valor cárnica-ganadera. De los casi 121 M destinados a las tres propuestas, el 55,5% provendría de los fondos NextGenerationEU -67,1 M€, siempre que percibieran la totalidad de la ayuda solicitada-, mientras que el 44,5% restante sería subvención privada.

Desde la oficina de LLYC, dirigida por el exsecretario general de Agricultura Fernando Moraleda, hacen hincapié en "la complejidad de los requisitos técnicos y burocráticos y los tiempos de los procedimientos administrativos", así como también en " la demora en la publicación del texto de la convocatoria ", lo que ha complicado la presentación de grandes proyectos tractores. No obstante, reconoce el "gran desafío" que conllevaban la composición y coordinación de los Perte, y destaca "los esfuerzos y logros alcanzados entre ambos sectores (público y privado) para mejorar un instrumento que, recordemos, tiene vocación de permanencia en nuestro ordenamiento".

Argal, Noel y Vall Companys capitanean los proyectos

El proyecto de mayor inversión económica prevista lo propone la agrupación 'MeatWay' y está liderado por Vall Companys. Participan 21 empresas más de las cuales seis son pymes y tendría impacto en siete comunidades. La inversión prevista es de 50,3 M€ y podría conseguir hasta 32 M (63,5%) por parte de los fondos europeos en base a la documentación presentada. La mayor parte de las ayudas (20,3 M, el 63,4%) han sido reclamadas vía préstamo mientras que las subvenciones sumarían un máximo de 11,7 M.

Otra de estas iniciativas se denomina 'Carnity', con el Grupo Argal como empresa tractora y 24 asociadas más con gran presencia de sociedades de tamaño pequeño o mediano -concretamente 13 compañías, más de la mitad-. Su presupuesto asciende a 44,7 M€ con el 55% del total solicitado a las ayudas del Perte: 20,8 M en forma de subvenciones (84,6%) y los 3,8 M restantes como préstamos.

El tercer proyecto es el encabezado por Noel bajo el nombre de 'Inno Meat'. Supone una inversión de 25,7 M con ayudas solicitadas por valor de 10,5 M (casi el 41%): 7,5 M a través de subvenciones y 3 M más en forma de préstamos. La agrupación empresarial suma nueve compañías más (siete pymes) con instalaciones en Cataluña, Aragón y las Islas Baleares.

Entre las grandes empresas que participan en los tres proyectos comentados destacan Corporación Alimentaria Guissona, La Comarca Meats, Faccsa-Missa (grupo formado por Frigoríficos Andaluces de Conservas de Carne y Mataderos Industriales Soler ), Famadesa, Fribín, Matadero de Guijuelo, Señorío de Montanera y Moralejo.

El cambio climático y la digitalización: principales líneas de mejora

Los proyectos incluidos buscan mejorar la competitividad del sector agroalimentario español, incrementando su sostenibilidad e impulsando la trazabilidad en la cadena de valor, la digitalización y el apoyo a la I+D+i del sector, como fórmula para fortalecer la industria agroalimentaria. Concretamente los tres proyectos tractores tienen porcentajes alrededor del 60% de su presupuesto dedicado a la reducción de los efectos del cambio climático, muy por encima del mínimo exigido del 40%. También es reseñable el énfasis que se ha puesto en el la investigación y el desarrollo, con 49 proyectos primarios centrados en este campo.

La reducción de la huella de carbono y la huella hídrica destaca como uno de los "aspectos fundamentales" en los que dichas iniciativas se enfocan para hacer la cadena de valor del sector cárnico más sostenible y digital. La mejora de la eficiencia energética, el consumo eléctrico a partir de fuentes renovables, el uso de nuevos materiales más sostenibles y la reducción del plástico, mermas y desperdicios alimentarios son algunas de las líneas estratégicas para conseguir este fin.

En lo que respecta a la digitalización y la automatización en la industria cárnica, los proyectos se centran en el desarrollo de "estructuras comunes de información para fortalecer los sistemas de trazabilidad y seguridad alimentaria, proyectos I+D+i para mejorar la competitividad, etcétera", detalla LLYC. Todos estos proyectos además colaboran a dinamizar la actividad económica y creación de empleo en zonas rurales, contribuyendo al reto demográfico y la cohesión territorial.

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