El sector de panadería y bollería incrementó su producción un 5,1 % al cierre de 2022, facturando por ello ingresos un 27,4% superiores a los registrados un año antes, como consecuencia del contexto inflacionista en el que se encuentra nuestra economía. En concreto, el sector facturó 1.661,1 M€ con un volumen de producción de 949.754 t, según los datos presentados por la Asociación Española de la Industria de la Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac), que agrupa a las principales compañías panificadoras industriales de nuestro país.
El presidente de la asociación, Felipe Ruano, junto con José Miguel Herrero, director general de la Industria Alimentaria en representación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, fueron los encargados de dar a conocer los datos del sector que Herrero calificó de "positivos", apuntando además que confirman la "tendencia creciente tanto en valor como en volumen" del mercado de pan y bollería.
Atendiendo a los datos presentados, y desglosándolos por subsectores, el pan situó su producción en 745.896 t (+4,1%) y registró ventas de 988,9 M€ (+28,3%), mientras bollería y pastelería contabilizó 203.858 t (+9%) y una facturación de 672,3 M€ a lo largo del periodo.
La comparativa de los resultados obtenidos por el sector a ocho años (2015-2022) revela un crecimiento del 6,2% en la producción total y una variación del 40,4% en términos de facturación, a excepción de los ejercicios 2020 y 2021, gravemente afectados por el impacto de la pandemia mundial. En el periodo analizado, el pan redujo su producción un 0,6% en contraposición al incremento del 41,6% experimentado por bollería y panadería; registrando ambas categorías sendos avances del 25,4% y del 70,3%, respectivamente, en términos de valor.