La categoría de mantequilla sigue viviendo un momento dulce. Aunque sus números son tradicionalmente modestos, tanto si la comparamos con el resto de familias del sector lácteo cómo si lo hacemos con el consumo en países cercanos, lo cierto es que sus ventas experimentan un moderado crecimiento. Así, en el año móvil cerrado el pasado mes de octubre, la categoría en su conjunto avanzó un 4,4% en términos de volumen, con una caída de los precios medios del producto de ocho décimas, que dejaron el crecimiento en valor en tres puntos y medio.
Una evolución que contrasta con la de su sustitutivo clásico. En el mismo período, las ventas de margarina se desplomaron un 11,5% en volumen y un 12,2% en valor. Y la diferencia en valor entre las dos categorías sigue estrechándose, 98,9 M€ la margarina y 89,9 M€ la mantequilla, a pesar de que en volumen la primera dobla a la segunda (27.941 t frente a 13.881 t).
Pocas variaciones en cuanto a los principales actores del mercado, que mantienen sus posiciones desde hace años. La mitad del volumen consumido corresponde a marcas de la distribución, que han cedido algunas décimas de cuota en el último año móvil. Como primer operador se encuentra Corporación Alimentaria Peñasanta, principalmente con su enseña ‘Central Lechera Asturiana’ y un posicionamiento en precio superior al de la media del mercado, pero inferior al de competidores como Lactalis o Mantequerías Arias. Por debajo en cuota se mantienen compañías con un posicionamiento más local como Cadí o Mantequera del Tineo.
Por segmentos, la mantequilla clásica se mantiene como la opción mayoritaria. Aunque cede cuota al crecer por debajo del conjunto de la categoría, su comportamiento es superior al de las variedades“fácil de untar” y“ligera”,que cosechan leves retrocesos, mientras las enriquecidas retroceden un 20%. En la alternativa a la clásica, la fórmula emergente son las mixtas, que combinan la mantequilla con otras grasas vegetales y se aproximan ya a una participación del 5% en euros.
De hecho, el lanzamiento de productos que buscan combinar lo mejor de ambas categorías ha sido una constante en los últimos años, tanto desde el lado de las lácteas como de las untables vegetales. Se persigue una fórmula que sea fácil de untar,que incorpore un perfil más saludable en cuanto a su composición grasa y cuente con las cualidades organolépticas de la mantequilla. Pero la relación entre ambos productos no queda aquí. En los dos últimos años, algunos de los principales operadores lácteos han lanzado sus propias untables vegetales. Así, Lactalis cuenta con la marca de margarinas ‘Delínea’, que está consiguiendo una importante penetración sobre todo en hipermercados, si bien su cuota es de momento modesta (0,4% tanto en volumen como en valor). Por su parte, Capsa (que dispone de margarina para su división de hostelería), compite con un untable de soja bajo la marca ‘Alpro Central Lechera Asturiana’. La categoría, en todo caso, está firmemente controlada por Unilever (cuota del 61,2% en volumen y 77,5% en valor), que reafirmaba recientemente su voluntad de mantener este negocio en su portfolio.
Aparte de estas fórmulas mixtas, el otro desarrollo de producto destacable ha sido el lanzamiento de la primera mantequilla sin lactosa a cargo de Capsa. Una referencia que completa la gama sin lactosa de la compañía, destinada tanto a los intolerantes a este disacárido como a todos aquellos que han adoptado este tipo de productos, que son recibidos como más digestivos por una creciente parte de los consumidores.
Esta segunda juventud de la mantequilla está posibilitando incluso la construcción de nuevas instalaciones industriales, Así, Grupo Cafento proyecta la construcción de una fábrica para su filial Mantequera de Tineo (‘Lorenzana’, ‘Imperial’) que le permita ampliar su oferta, hasta ahora centrada en una gama premium con nuevas variedades e incrementar su producción, para doblar en diez años su volumen actual de 350 t anuales.
Desde el campo de la margarina, y con voluntad declarada de comenzar a operar en el campo de las referencias mixtas, han comenzado a funcionar las nuevas instalaciones de Gracomsa, puestas en marcha tras ejecutar una inversión de 9 M€.