Aunque pueda parecer contradictorio en un mercado como el de los caramelos y chicles, la cruzada emprendida por la sociedad contra el consumo de azúcar y la tendencia saludable están impulsando el desarrollo de gamas de limitación calórica y de azúcares, con materias primas naturales y libres de alérgenos, parámetros que están condicionando el acto de compra. La categoría de caramelos duros sin azúcar, por ejemplo, subió un 5,2% en valor para el TAM acumulado hasta junio pasado de Iri, con 31,93 M€, lo que representa un 33% del total. Un mercado liderado en su versión masticable por las enseñas ‘Virginias’, de Industrias Rodríguez, ‘Werther’s’ y ‘Dietorelle’, comercializadas por Storck Ibérica, y ‘Mentos’ de la italiana Perfetti. La primera ha ampliado su colección de caramelo blando sin azúcares añadidos, con un nuevo formato de 50 g y a un pvp, además, de 1€. Storck, por su parte, ha integrado la venta en España de la enseña irlandesa ‘The Jelly Bean Factory’, con posicionamiento gourmet, sin colorantes artificiales ni alérgenos, en formatos de alimentación e impulso, “una gama que está aportando más ventas de las previstas inicialmente”.
Agrícolas Promaver, del grupo mayorista hortofrutícola Jerónimo Barrio, ha girado hacia el mercado de la confitería saludable y, así, ha puesto en marcha de una nueva división de envasado, etiquetado y comercialización de caramelos de goma bajas en calorías y sin azúcar, gracias al uso del maltitol, con la enseña ‘Yummeat’. Para este su primer ejercicio de actividad, espera alcanzar unas de ventas 3 M€, un 75% en retail. Igualmente, Fini presentaba este año ‘Ositos Light’, propuesta que, libre de azúcares añadidos y grasas saturadas, reduce hasta en un 34% las calorías respecto a un producto similar, y que ahora acaba de lanzar también Damel, con productos de goma y regaliz con 0% azúcares y un 33% menos de calorías.
King Regal propone la mejora de sus referencias actuales con vitaminas, colorantes naturales y referencias sin gluten, a la vez que trabaja ya en la reducción del porcentaje de azúcar de algunos de sus productos. Dirigidos a impulso, Configirona va a ampliar la línea de caramelos sin azúcar ‘Geriovit’, con dos nuevas referencias, una de hierbas con extractos naturales y otra con colágeno.
En esta última línea, Damel lleva unos meses investigando el desarrollo de una gama de “caramelos funcionales con propiedades antioxidantes estrechamente relacionados con el suministro de colágeno”. El grupo cuenta con una división específica de caramelos funcionales, que dirige la filial Boston Nutraceutical Production, ahora con sede en la antigua fábrica de Valladolid de Mondelez. La instalación adquirida acogerá la producción de la línea de caramelos de goma ‘Vitaldín’, con valores añadidos tales como probióticos, fibra, calcio o multivitaminas para los canales de farmacia y parafarmacia, aunque la división funcional de Damel está integrada por cuatro distintas categorías: golosinas, caramelo duro y blando, serum y snacks .
El mercado lleva un par de años probando con éxito los caramelos y chicles funcionales, un negocio que alcanzaría ya unas ventas superiores a los 85 M€, según fuentes del sector. En esta categoría, El Caserío acaba de presentar la innovadora línea ‘BE4’, en formato bolsa de 65 g, unos caramelos “tolerantes y aptos para veganos, sin azúcar, sin lactosa ni gluten, sin grasa, con aromas y colorantes naturales, de venta, por ejemplo, en los supermercados de El Corte Inglés. La gama está integrada por cinco sabores distintos: ‘Fresh’, menta y té verde con vitamina C; ‘Energy’, de naraja y maracuyá, con un combinado energético de maca, ginseng siberiano, guaraná, bayas de goji, cano, té verde matcha, canela y cacao; ‘Antiox’, de cualidades antioxidantes gracias al uso de rosa mosqueta, acerola, machi y vitamina C; ‘Detox’, desintoxicante de sabor manzana y uva, junto a un mix de cardo mariano, hierba de cebada y trigo, lúcuma, clorella y té matcha; y, por último, ‘Citrus’, también con vitamina C.
Del mimo modo, la tendencia vegana comienza a implantarse en el sector, eliminado el uso de gelatinas de origen animal. Burmar Sweets lanzó en febrero una gama de golosinas ecológicas, bajo la enseña de ‘Eco Jellies’, apto como producto vegano, en botes reutilizables BPA free de 80 g. La línea está coloreada a base de frutas y verduras, con un 10% de zumo y 100% natural, y, además, no contienen gluten, ni lactosa, sin conservantes y 0% materias grasas. El uso de ingredientes de origen vegetal también es la seña de identidad de ‘Black Liquorice’, regaliz negro de Fini con tan sólo cuatro ingredientes naturales en su elaboración y, por tanto, apto para el consumidor vegano. Vidal Golosinas y la propia Mercadona también disponen de alternativas en caramelos para veganos.