La cadena de supermercados catalana Caprabo, filial de Grupo Eroski ha cerrado el ejercicio 2018 (a 31 de enero de 2019) con una facturación bruta de 912 M€, lo que supone un 8% menos con respecto a la cifra obtenida el año anterior. La compañía atribuye esta caída de su cifra de ingresos al saneamiento y la transformación de su red de supermercados.
Por lo que se refiere a su reestructuración comercial, por un lado, el cierre de tiendas poco rentables y, por otro, la venta de inmuebles fueron dos de las principales decisiones que tomó la compañía para mejorar su rentabilidad. En total, fueron ocho los locales vendidos por la empresa, lo que supuso el traspaso de 10.659 m2 de superficie comercial. Entre ellos, se incluyen los seis centros vendidos a Lidl y uno a la cadena leridana Plusfresc. A su vez, clausuró otros tres puntos de venta propios en la localidad barcelonesa de Gavà y los municipios tarraconenses de Figueres y Roses, aunque también retomó la apertura de tiendas propias con la puesta en macha de un nuevo supermercado en el Barrio de Gràcia de Barcelona.
En el último año, Caprabo también continuó aminorando su presencia en Navarra y replegándose a Cataluña. Cuatro de sus centros en Burlada, Ártica, Pamplona y Villava se reconvirtieron bajo las líneas de negocio 'Eroski City' (2 tiendas) y 'Eroski Center' (2), por lo que, a cierre de 2018, a Caprabo únicamente le quedaban en esta región 17 supermercados (10.250 m2). Tras estos movimientos, su estructura de tiendas propias se ha reducido a 255 puntos de venta (216.176 m2), tras contraer un 7,4% su superficie.
En el bando de las franquicias, Caprabo añadió siete tiendas (1.551 M2), en su mayoría bajo su enseña original 'Caprabo' (cinco) y el resto, en la línea de 'Aliprox'. Por contra, restó otros tres centros (599 m2), registrando un saldo neto de cuatro unidades (985 m2). En su mercado estratégico, su planta comercial se contrajo un 5%, hasta los 219.745 m2. No obstante, todo ello se encuadra en un plan estratégico orientado a ganar eficiencia y competitividad.
Con este propósito, Caprabo también está inmersa en un proceso de transformación de sus supermercados para adaptar sus tiendas a los cambios del entorno competitivo y adecuar su oferta a las nuevas necesidades del consumidor. En 2018, reformó el 20% de su red y tiene previsto finalizar 2019 con más del 40% de sus tiendas adaptadas al nuevo modelo. El nuevo Caprabo refuerza su "apuesta por los productos frescos, la salud como atributo transversal, los productos de proximidad, el ahorro personalizado y la innovación, con el objetivo de optimizar la experiencia de compra", según destaca la cadena.
También el pasado año, Caprabo anunció un plan de transformación logística destinado a mejorar la gestión y eficiencia de las operaciones para dar respuesta a las necesidades de su nueva generación de supermercados. Para ello, ha iniciado obras de adaptación en su plataforma de Abrera (Barcelona), mientras que trabaja en la construcción de un nuevo centro de distribución en la ZALPort de El Prat de Llobregat (Barcelona), con una inversión de 20 M y 24.000 m2 de superficie, desde donde gestionará de manera integral los productos frescos que cada día vende en sus tiendas. La nueva plataforma también gestionará el negocio de venta online de Capraboacasa y se constituirá como la nueva sede central de la compañía. Se prevé que entre en pleno funcionamiento en 2020.
En la actualidad, Caprabo cuenta con 320 supermercados (232.023 m2), entre los que se incluyen cinco establecimientos en Andorra. En Cataluña su red alcanza las 301 tiendas, mientras que el resto se reparten en Navarra (14). El 23,3% de estas tienda son franquicias.Por su parte, Grupo Eroski alcanzó ventas de 5.393 M en 2018, un 2% menos y redujo su beneficio a 1,6 M, frente a unas ganancias de 33,21 M atribuidas en el ejercicio anterior.