Entre los abundantes sectores que confluyen en la producción de materiales de construcción, el modelo de distribución directa mediante tiendas propias ha triunfado sólo en la industria de revestimientos de piedra sintetizada y cerámicos, de pinturas y de mobiliario de cocina. Se trata en la mayoría de los casos de compañías líderes en sus respectivos segmentos, como Cosentino, Levantina o Porcelanosa, que han forjado con éxito una potente trama comercial tanto en España como el exterior. En cambio, dentro de pinturas, la apuesta, ignorada por el líder, se ha centrado en una amplísima red de pequeños establecimientos dentro del mercado nacional. Por último, dentro de muebles de cocina, la implantación ha venido en forma de franquicias de los grandes productores europeos, algunos de ellos inmersos todavía en su expansión por la Península.