La multinacional surcoreana LG estudia la instalación de una fábrica de baterías para coches eléctricos en la planta de la japonesa Nissan en la Zona Franca de Barcelona, lo que permitiría salvar entre 1.500 y 2.000 puestos de trabajo de la automovilística, que está afectada por una decisisión de cierre en diciembre de 2021, según ha informado TV3. La implantación de LG podría salvar hasta el 80% de los empleados afectados por el ERE de Nissan, y como mínimo podrían mantener su empleo todos los operarios menores de 50 años (1.548). LG Ghem, con sede en Seúl y filial de LG, no es la única empresa interesada en hacerse con la planta catalana, ya que la francesa Schneider Electric también habría preguntado por los terrenos del fabricante nipón en la Ciudad Condal.
Las administraciones catalana y española trabajan en la búsqueda de posibles inversores industriales con el fin de mantener la actividad y el empleo en las plantas de Nissan en Barcelona, que cerrarán sus puertas en diciembre de 2021, dejando en la calle a 2.525 trabajadores si no llega un invesor. La instalación de esta planta en Barcelona permitiría proveer de baterías también a Seat, que tiene en Martorell (Barcelona) la mayor fábrica de automóviles de España y que ha anunciado recientemente una inversión de 5.000 M€ entre 2020 y 2025 en nuevos proyectos de I+D para el desarrollo de vehículos en su Centro Técnico, especialmente eléctricos.
LG opera en España a través de la filial LG Electronics España, S.L. En 2019 logró mejorar la rentabilidad de su negocio, a pesar de reducir las ventas. En el primer semestre de 2020, LG España registra un descenso de la facturación del 30% debido las medidas administrativas adoptadas para contener la pandemia del coronavirus.