El desayuno es el servicio más importante del hotel y la carta de presentación del resto de sus servicios de restauración” es una de las máximas repetidas por los proveedores de productos de alimentación y bebidas para el desayuno en hoteles. Un servicio que los hoteles “han perdido en parte por los precios desorbitados”, según acusan algunos de estos proveedores, o que se está reformulando, según afirman otros, con una mayor variedad y calidad de productos.
Los establecimientos de hostelería gastaron 33.044 M€ en 2012 en sus compras de alimentación y bebidas (-4,1%, respecto a 2011), según los datos del Informe sobre Alimentación en España realizado por Mercasa para el Magrama. Según este informe, el consumo de alimentos fuera del hogar cayó un 12% en el periodo comprendido entre 2009 y 2012 y los hoteles en concreto, perdieron un 4,6% de visitas ese año. Por momentos de consumo, el desayuno concentró el 17,1% de las visitas (-3,5%) y el 7,6% de las ventas (-0,5%).
En líneas generales, los hoteles han acusado un descenso en el número de pernoctaciones (que se traduce inmediatamente en menos clientes para la hora del desayuno), así como una acusada reducción de sus ventas por los servicios de restauración. Una parte de su negocio que resulta de gran importancia para los establecimientos hoteleros, ya que se calcula que en torno al 30% de sus ingresos proceden del departamento de alimentación y bebidas.