Monodosis versus granel
Algunos alojamientos ponen el acento en los envases individuales, que ofrecen una imagen de calidad y limpieza, sacrificando en parte el precio; mientras que otros señalan que la utilización de graneles en yogures, cereales o mermeladas repercuten positivamente en el importe del desayuno pero además, bien presentados, van en línea con la creciente preocupación de los clientes por la sostenibilidad y la ecología. Así, por ejemplo, mientras Jugos Canarios está aumentando su oferta de zumos a granel, en bag-in-box de 10 l (incluyendo las variedades sin azúcar y con pulpa, además de nuevos sabores), en cambio Helios opta por potenciar su catálogo de envases mini, con el lanzamiento de monodosis de tomate para untar y mermelada ecológica. También Capricho Andaluz dispone de un amplio portfolio de aceites, miel, membrillo, edulcorantes, sal, patés y derivados en monodosis, que ha ampliado en 2014 con tarrinas de aceites monovarietales y que volverá a aumentar en 2015.En el caso de la especialista en alimentación dietética Dr. Schar, todos sus productos van envasados en formatos individuales para “garantizar que no haya contaminación cruzada”, entre alimentos con y sin gluten, por ejemplo.
Dentro de esta tendencia podemos incluir también el boom de las cápsulas de café. Este producto es, según varios profesionales consultados, “el eje del desayuno”, en tanto en cuanto se convierte, en parte, “en el medidor de la calidad de la propuesta del establecimiento”. Es por ello que las cápsulas están tomando cada vez más protagonismo, si bien en esta cuestión el establecimiento se debate entre la buena imagen que generan y su elevado precio.