El presente análisis se enfoca en el formato híbrido que combina en un mismo espacio la venta detallista de productos y el propio servicio de hostelería. Esta fórmula, que diversifica los ingresos gracias a su multiactividad, destaca por su heterogeneidad, ya que abarca una amplia variedad de conceptos gastronómicos, pero con un fuerte componente de especialización en su oferta. El artículo recoge ejemplos de los grupos y enseñas que apuestan por este modelo de negocio, así como el reparto de las ventas de sus distintas actividades y las principales tendencias.