La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha presentado el informe ‘La contribución de la industria de alimentación y bebidas a la España Vaciada’. Para ello, la Federación ha contado con la colaboración de Cajamar Caja Rural y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
En la presentación han participado el secretario general de Agricultura y Alimentación, Fernando Miranda; Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB; y Eduardo Baamonde, presidente de Cajamar Caja Rural.
Mauricio García ha abierto la reunión haciendo referencia a la España vaciada. El 79% de los municipios de nuestro país concentra apenas el 10,4 % de la población española y la Industria de Alimentación y Bebidas es un actor imprescindible en las zonas despobladas. Esto se refleja en las 10 aportaciones que la industria hace a estos territorios.
1. Lucha contra la despoblación. El 17% de la población de la España vaciada se asocia a la Industria de alimentación y Bebidas (IAB), lo que se traduce en 305.376 hogares.
2. Creación de riqueza. La IAB dinamiza el 10,6 % del PIB en toda España. Este porcentaje aumenta al 16, 2 % del PIB en las zonas de la España vaciada.
3. Contribución a las arcas públicas. Aporta cerca de 6.000 M€ a los ingresos públicos en estos territorios.
4. Impulso y desarrollo de la actividad empresarial. De las más de 30.000 empresas que componen el total de la IAB, 4.788 empresas, el 15,6% se asientan en la España Vaciada. Este porcentaje es mucho mayor al 8,8% correspondiente a la media del conjunto de la economía.
5. Creación de empleo. El 17,2% del total del empleo en estos municipios se asocia a la industria de alimentación y bebidas, mientras que para el conjunto de España este porcentaje representa el 10%. El 31% del empleo de la IAB es femenino. Detrás de los servicios, la industria es la rama en la que menos se acusa la brecha de género en la España Vaciada respecto al conjunto de España.
6. Dinamización y digitalización del territorio. Se da un impulso en el sector de las telecomunicaciones de 273 M€.
7. Mantenimiento de infraestructuras y servicios. Esto permite la dotación de infraestructuras clave para el desarrollo.
8. El reclamo del turismo gastronómico. Se estimula el gasto turístico en estas zonas a través de su gastronomía y de otras actividades de ocio relacionadas con la industria.
9. Gestión sostenible. Hay un interés relevante por preservar el territorio natural ya que se nutren de él. Entre 2014 y 2018 el sector ha mejorado un 20% su eficacia energética, ha ahorrado un 19% en el consumo de agua y ha reducido la generación de residuos en un 27%.
10. Contribución al bienestar social. El Impacto social que esta industria aporta al resto del país es equivalente a 85.106 M€. Por cada euro de valor añadido bruto directo de la industria de alimentación y bebidas se generan 3,22 euros de valor social asociado a la nutrición.
Por otra lado, Fernando Miranda ha destacado que España es la cuarta potencia agroalimentaria europea y la octava en el ranking mundial. Puestos que se han podido alcanzar gracias al desarrollo de la sostenibilidad, la digitalización y la innovación. Tres aspectos en los que se está haciendo hincapie mediante medidas fiscales. El secretario ha añadido además que estamos ante un horizonte de cambio, común a lo que está sucediendo en el resto de países de la Unión Europea.