Los servicios logísticos y de reparto última milla para el ecommerce siguen evolucionando a gran velocidad, tras la revolución que supuso 2020 para el sector. Aunque el crecimiento de las ventas del comercio electrónico se ha frenado desde el fin del confinamiento, estas se mantienen al alza, con una cadencia más moderada pero sostenida en el tiempo. El avance ya logrado y las expectativas de crecimiento futuro sigue siendo un enorme desafío para las empresas logísticas, tanto de las encargadas del almacenamiento, como las de reparto. Todas ellas se enfrentan a nuevos retos que se analizan en profundidad en el último Informe Alimarket de Logística y Reparto para el Ecommerce y que resumimos aquí.

1. Más espacio logístico. Las principales empresas logísticas especializadas en prestar servicio al ecommerce, con XPO y Amazon a la cabeza, casi duplicaron el espacio de almacenaje dedicado a este fin. Además, surgen nuevos proyectos y más empresas logísticas apuestan por este negocio, algunas convirtiéndolo en su core-business.

2. El transporte urgente se vuelca en el B2C. Las tradicionales agencias de paquetería y mensajería urgente, lideradas por Seur y MRW, han hecho del reparto BC2 procedente del ecommerce su caballo de batalla, invirtiendo sustanciosas sumas en infraestructuras y tecnología para competir entre ellas y con las nuevas plataformas tecnológicas de reparto.

3. Las plataformas tecnológicas evolucionan hacia la logística y se especializan. Las numerosas start-ups para el reparto de última milla que han surgido en los últimos años están ampliando sus servicios para controlar todas las fases de la logística ecommerce. Muchas de ellas, como Paack o Mox, ya están creando una nutrida red de almacenes de trasbordo e, incluso, plataformas de gran tamaño, para agilizar la entrega. Por otro lado, cada vez son más las compañías que buscan distintos nichos de mercado, como la entrega de mercancía voluminosa o de supermercados, para diferenciarse.

4. Más allá de la última milla. Con la vista puesta en dar un servicio cada vez más rápido y ecosostenible, un grupo de empresas empiezan a especializarse en soluciones de "última yarda", que ofrecen a otros operadores dar el último paso de reparto. Para ello, se apoyan en pequeños "almacenes urbanos" o, incluso, en los domicilios de sus repartidores, que hacen la entrega a pie o en vehículos ecológicos en un pequeño radio de acción.

5. Siguen creciendo las alternativas de entrega a domicilio. Aunque la entrega a domicilio sigue siendo mayoritaria, y además creció durante el confinamiento, todos los expertos coinciden en que tarde o temprano se acabarán imponiendo otras formas de recogida más eficientes y baratas. Por ello, las taquillas inteligentes y los puntos de entrega en establecimientos colaboradores siguen desarrollando sus proyectos, conscientes de que quien llega primero y más lejos, puede ser el vencedor. En paralelo, cada vez surgen más iniciativas público-privadas para crear ecosistemas de reparto más sostenibles, basados en la colaboración entre empresas logísticas, micro-hubs de consolidación de cargas en espacios públicos y vehículos ecosostenibles.